Archive | marzo 2022

Esto es España

España atraviesa en estos momentos una situación muy delicada, en todos los aspectos, probablemente la más débil internacionalmente hablando desde que Dwight D. Eisenhower visitó a Franco en el año 1959.

Después del triunfo socialista de Rodríguez Zapatero tras el infausto 11-M sobre el que el juez Bermúdez, que sentenció el caso en su día dijo que «La verdad es tan terrible que España no está preparada para conocerla», el gobierno de Mariano Rajoy que no rectificó en nada las políticas de su antecesor y que prefirió una moción de censura que sabía tenía perdida antes que traspasar el poder a alguien de su propio partido, llegó al poder Pedro Sánchez con el apoyo de los independentistas vascos -blanqueando etarras y asesinos de casi mil ciudadanos españoles- secesionistas catalanes -blanqueando asesinatos guerra civilistas pasados y urdiendo un engranaje legal para liberar a golpistas independentistas-, anticapitalistas que quieren acabar con el libre mercado y la sociedad liberal, anti constitucionalistas que pretenden derogar la Constitución que nos dimos todos los españoles en el año 1978 y que supuso un fraternal reencuentro, y comunistas de nuevo cuño, surgidos de la nada y que en gran parte se han hecho ricos en pocos años. Y todos, desde ese año 2004, callan, como si tuvieran que taparse sus vergüenzas entre ellos, como si tuvieran que ocultar inconfesables pecados compartidos, como si fueran conscientes que el pueblo nunca les perdonaría sus actuaciones personales y mucho menos gubernamentales de quienes han dirigido esta nación y han llevado a penurias económicas y desencuentros olvidados a su ciudadanía.

Las fricciones entre quienes componen el Gobierno son evidentes. Según Alerta Digital, Soros amenazó a Pedro Sánchez con dejar caer el Gobierno Español si no cedía a las peticiones de Marruecos sobre el Sahara. Rusia y China emiten orden internacional de arresto de George Soros por “terrorista global” e “hijo de Satanás”. No he visto ninguna embarcación de Open Arms recogiendo refugiados ucranianos y eso que las ONG de Soros tienen su base principal en Ucrania. Podemos y resto de comunistas españoles se oponen a la anexión del Sahara a Marruecos. Igualmente, a facilitar armas a Ucrania en defensa de los ataques expansionistas rusos, que podrían incidir sobre algún país de la OTAN y entonces sí que tendríamos “la guerra de las galaxias” en Europa porque, han avisado, “la pelea de fondo que la clase trabajadora (¿) y los pueblos debemos sostener, es la lucha por un orden alternativo al capitalismo”.  Independentistas catalanes y vascos se oponen al expansionismo ruso y marroquí pensando en su frustración personal y regionalista, y 7.000 fills de la puta mare del diable que gritan “puta España” se esconden cuando 35.444 catalanes y a la vez españoles, cantan y animan sin cesar a la selección española de fútbol en Barcelona, y el Grupo Z, ese fundado en 1976 por Asensio padre, escribe que son “colonia española que reside en Cataluña”, conculcando su propia identidad que en su página web dice: “contribuir a la formación de una opinión rigurosa y libre, plural e independiente, fomentando la libertad de expresión e información y los derechos humanos fundamentales … ser un diario libre, plural, progresista, laico, no dogmático, respetuosos con las decisiones de la mayoría …”. Sería muy interesante analizar los flujos bidireccionales grupo empresarial y región autonómica.

Los rusos son listos, muy listos. Acostumbrados como estaban al comunismo, mentes educadas para aceptar sin pestañear las órdenes emanadas del caucus dominante, ricos a costa del sudor obrero, con un receso provocado por la perestroika reformista de Mijaíl Gorbachov, caracterizada por una apertura hacia los países del bloque occidental, cierta liberalización del sistema económico y transparencia informativa, han vuelto a mear fuera del tiesto por el uso y abuso del vodka ingerido por su presidente, que ha acumulado tal riqueza personal que micciona sobre tronos urinarios de oro y que ha puesto de manifiesto, una vez más, que de un comunista cabrón solo se puede esperar una cabronada.

Pero el Nikita Rusek, que es el Juan Español ruso, solo que en cirílico, ha aprendido muchas lenguas extranjeras, entre ellas el español, porque ha pensado que no puede durar mucho un país que no quiere leer a Cervantes en su propio idioma, calculando que al final podrían hacerse con el poder en España, con quién tienen clavada una espinita desde que les paró los pies un tal franquito, a la vez que fueran guardianes eternos para la posteridad de El Quijote en su forma original, como hacen con Fiódor Dostoyevski, Lev Tolstói, Antón Chéjov o Nikolái Gógol.

Y ahora, que tienen cierto resquemor y mosqueo con Ucrania por aquello de no correrse, las fronteras, las cosas sabemos cómo empiezan, pero no cómo acaban, han metido el miedo en el cuerpo a todo el mundo, especialmente a Europa.

España que, como no podía ser de otra manera, forma parte de la defensa militar de Europa, la OTAN o NATO, y del mercado económico de 400 millones de ciudadanos, la Unión Europea, les ha enviado a los ucranianos ametralladoras Ameli del año 1982, de retroceso retardado, retiradas del Ejército Español en el año 2012 porque fallaban más que la escopeta Gañote, que era una barraca de ferias que había en mi pueblo que, como diría Gila, no matan pero asustan aunque, eso sí, descubres el puesto desde dónde has disparado. Porque otra cosa no, pues Rusia tendrá armas nucleares, pero nosotros tenemos pasos de cebra arco iris, bancos morados, golpistas en la calle, etarras blanqueados, perros con ADN, vagos a raudales, un gobierno resiliente, hemos inventado la fregona y el botijo, y  somos campeones del mundo en picaresca. Y la justicia, para aquellos que no se levantan a las seis de la mañana para ir a trabajar, tiene VAR, como en el fútbol, se sabe que el balón ha dado en la mano, pero desconocemos si fue de forma involuntaria o forzada.

Y Pedro Sánchez reclama “enfoque de género” y “salud sexual” en el ataque de Rusia a Ucrania. No se si se refiere a que las mujeres no participen en la guerra -vaya, resulta que para esto no hay igualdad- o a rehabilitar el Cuerpo de Pajilleras del Hospicio San Juan de Dios de Málaga, conocidas como las “Hijas de Nuestra Señora del Vergo Encarnado”, creado en diciembre de 1840 con especialísima dispensa del Obispo de Andalucía, para superar “el mal talante, la ansiedad y la atmósfera saturada de testosterona en el pabellón de heridos del hospital”, a las que se sumaron voluntarias seculares, atraídas por el deseo de prestar tan abnegado servicio. A estas voluntarias, se les impuso (a fin de resguardar el pudor y las buenas costumbres) el uso estricto de un uniforme: una holgada hopalanda que ocultaba las formas femeniles y un velo de lino que embozaba el rostro.

Mientras esto ocurre en el mundo, en España las ayudas y préstamos de la Unión Europea, en vez de dedicarlas a hacer viviendas sociales, de las que se necesitan muchos cientos de miles, e invertir en empresas de nueva tecnología y futuro, se están dilapidando en tapar parches y bocas independentistas, subvenciones a amiguetes, sin control parlamentario y con un contubernio entre partidos que ha llegado al Tribunal de Cuentas, aceptando que sea el Estado, a través de una Comunidad Autónoma, quien responda de las transgresiones jurídicas realizadas por alguien contra el propio Estado. Algún día, cuando pasen muchos años y algún historiador quiera profundizar en este tema, deberá leerlo más de una vez para poder comprenderlo.

Hemos abandonado el campo, sus hombres y sus productos, estamos entrando en un tenso periodo en el que los países subdesarrollados van a inundar nuestros mercados de frutas y verduras más baratas que el coste de producirlas en España; cuando llueve, por unos cuántos ecologistas sin representación parlamentaria de ningún tipo, lo que es igual, de insignificancia nacional, todos los años se viernes millones de hectómetros cúbicos al mar y no son recogidos en pantanos, porque eso son cosas franquistas, pero el agua va a ser el petróleo del siglo XXI, los precios van a subir de una forma exponencial, porque ya, ni llueve: la Agencia Española de Meteorología ha confirmado que España está siendo rociada por aviones con dióxido de plomo, yoduro de plata y diatomita, para que haga buen tiempo y vengan los turistas. Si es difícil hacer un cliente, es más difícil conservarlo, y España, opinión personal, nunca volverá a ser la potencia que fue en turismo, porque ya no existe la seguridad ciudadana que había, los precios se han desbocado al querer vivir todo el año solo trabajando únicamente seis meses en verano, y la competencia en calidad y servicio ha sido superada por muchos otros países.

Pero tranquilos, ya tenemos nuevo presidente de la oposición en la persona de D. Alberto Núñez Feijóo, que ha sido elegido con el 98,35% de los votos, mayoría más absoluta que cuando votábamos en la democracia orgánica de Franco. Y lo primero que ha hecho es nombrar presidente del Comité de Derechos y Garantías Nacional del PP a José Antonio Monago, el mismo que cuando fue Senador visitaba a su amiga Olga en Tenerife every two weeks con cargo al erario, según informó la Cadena Ser entonces. Mi suegro decía: Esto no tiene solución, porque esto es España.

Antonio CAMPOS

La culpa la tiene Ucrania

El Consejo de Ministros celebrado ayer 29 de marzo de 2022 ha aprobado una serie de medidas como “Respuesta a las consecuencias económicas y sociales de la Guerra en Ucrania”, poniendo así todo el énfasis en dicha contienda bélica de los males económicos-financieros, retroceso del estado de bienestar y aumento de la inflación en los que en estos momentos nos encontramos en España.

Entre las medidas aprobadas, destacamos:

Rebaja 0,20 euros por litro de combustible repostado, gasóleo, gasolina y gas para todos los conductores, con lo que calculan que el impacto será de 1.423 millones de euros, debiendo ser adelantado ese importe por los suministradores de carburantes y solicitar mensualmente su devolución al Estado.

En aquellas empresas beneficiarias de ayudas directas en las que haya aumento de los costes energéticos, ello no podrá constituir causa objetiva de despido hasta el 30 de junio de 2022. El incumplimiento de esta obligación conllevará el reintegro de la ayuda recibida. Igualmente, no podrán utilizar estas causas para realizar despidos las empresas que se acojan a las medidas de reducción de jornada o suspensión de contratos reguladas para ERE o ERTE.

Limitación de alquileres de viviendas. Contiene una limitación extraordinaria de la actualización anual del alquiler de la vivienda habitual, impidiendo subidas superiores al 2% hasta el próximo 30 de junio.

Se aprueba una nueva línea de avales de créditos ICO por 10.000 millones de euros, cuando todavía quedan por cubrir más de 25.000 millones de la anterior, puesto que los solicitantes no reúnen las condiciones de viabilidad a futuro de las empresas demandantes, por lo que, a la vez, se extiende el plazo de vencimiento de los préstamos avalados por el ICO y el plazo de carencia para los sectores más afectados. Mucho me tengo que equivocar si al final no somos todos los españoles quienes pagamos esta fiesta.

Ayudas para el sector agrario y pesquero: 193,5 millones de euros para los sectores agrarios y ganaderos en conjunto; la pesca extractiva y acuícola contará con unas ayudas de 68,2 millones de euros; y el sector productor de leche percibirá un total de 169 millones de euros en ayuda directa, de los que 124 millones de euros son para el sector productor de leche de vaca (210 euros por vaca hasta un máximo de 40 animales por beneficiario, 145 euros por animal entre 41 y 180 cabezas; y 80 euros por más de 180 vacas), 32,3 millones de euros para los productores de leche de oveja (15 euros por animal) y 12,7 millones de euros para los de leche de cabra (10 euros por cabeza).

Las ayudas directas del Estado para buques y empresas armadoras pesqueras para compensar por el incremento, sobre todo, del precio del combustible sumarán 18,18 millones de euros y oscilarán entre los 1.550,52 euros por barco (con un tonelaje bruto de menos de 25) hasta un máximo de 35.000 euros para los buques a partir de 2.500 de tonelaje bruto.

Hay otra serie de pequeñas ayudas y la posibilidad del aplazamiento en el pago de las cuotas de seguridad social por tres meses.

Se modifica, en contra de la opinión de cualquier ingeniero agrícola, la obligación de dejar en barbecho un 5 % de sus superficies de cultivo y se flexibiliza el requisito de diversificación. Con ello, se podrán movilizar más de 600.000 hectáreas declaradas como superficies de interés ecológico, así como 2,16 millones de hectáreas declaradas para cumplir el requisito de diversificación de cultivos.

Se aprueba una serie de actuaciones destinadas a ayudar a la industria gran consumidora de energía, consistente en una reducción en la factura eléctrica del 80% del coste correspondiente a los peajes de acceso a las redes de transporte y distribución de electricidad aplicables en cada momento, hasta el 31 de diciembre de 2022 por un total de 225 millones de euros. Y se destinarán 125 millones de euros en ayudas directas a empresas gasintensivas, de lo que se beneficiarán unas 1.600 empresas, de las cuales el 88% son pymes. Otra medida adicional por 73,6 millones de euros serán subvenciones para compensar los cargos de la factura eléctrica destinados a la financiación de la retribución específica a renovables y cogeneración de alta eficiencia.

En un despropósito digno de parodia de Tip y Coll, como sus amigos de “la ceja” están caninos, se incorporan medidas para “paliar las consecuencias desfavorables de la guerra en el ámbito cultural, ya que se considera necesario apoyar a los artistas, empresas e instituciones afectadas por esta situación, para que continúen con su actividad, preservando su libertad de creación”. ¿Y por qué no una importante bonificación fiscal sobre el beneficio que declaren de su “obra artística”? ¿Tenemos los españoles que pagar los jueguecitos de quien hace películas que solo ven sus amigos y familiares?

El plan también refleja el acuerdo alcanzado entre el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana y el Comité Nacional de Transporte por Carretera (CNTC), con un paquete de medidas inmediatas para paliar las consecuencias del conflicto en Ucrania que supondrá una inyección de más de 1.000 millones de euros, incluyendo la bonificación al precio del combustible que supera los 600 millones para el sector. Y se incluye una línea de ayudas directas de 450 millones, que supondrán ayudas de 1.250 euros por camión, 900 por autobús, 500 por furgonetas y ambulancias, y 300 por vehículo ligero (taxis y VTC).

Y hace un apartado especial sobre las facilidades a los refugiados ucranianos que soliciten la nacionalidad española, que estarán exentos de aportar los certificados de nacimiento y antecedentes penales de su país de origen, asimilándose así a las personas refugiadas y apátridas reconocidas como tales por el Ministerio del Interior.

Entre esos refugiados, ¿no hay ningún delincuente, violador, asesino, incluidos los que liberó al antiguo payaso y hoy presidente de Ucrania a cambio de su actualizada película “Doce del patíbulo”? ¿Huyen de su país negándose a defenderlo y pretenden que los muertos los pongan la OTAN y Estados Unidos? ¿Con qué fondos dinerarios contamos en España para atender adecuadamente a esas personas? ¿No debíamos sentir con el corazón y pensar con la cabeza? Por favor, sumen el importe total de las medidas adoptadas “para paliar las consecuencias del conflicto en Ucrania” y compárenlas con el cuadrante que sigue a continuación, y díganme qué es más urgente y necesario.

Todo iba bien

Todo iba relativamente bien y vivíamos en paz hasta que en 2014 apareció Podemos. Nos dijeron que todo era malo, se autodenominaron indignados, al resto casta. Inventaron problemas donde no los había, enfrentaron a padres con hijos, mujeres con hombres, homosexuales con heteros.

Resucitaron la guerra civil ya olvidada, hablaron de cunetas, de buenos y malos, donde había convivencia llegó el odio. A los que creaban empleo los convirtieron en explotadores y a los orgullosos de España en fascistas. Adoctrinaron a los jóvenes haciéndoles intolerantes. Enfrentaron lo público con el resto y hablaron de vivienda digna mientras ellos utilizaban los hospitales privados y se mudaban a chalets con piscina y jardín de 2.000 metros cuadrados. Pasamos de ser aliados en la UE de USA a serlo de las dictaduras latinoamericanas. Empezamos a adorar a dictadores abyectos como Chávez o Maduro, junto con el Ché o los Castro y el propio Lenin mientras nos quitaban el orgullo de la transición y la Constitución del 78 porque decían que fue un invento franquista. Y mientras tanto, nos dijeron que no sabíamos lo que era la libertad, ni la tolerancia, ni el sexo, como si no hubiésemos sido jóvenes nunca. Ellos nos enseñarían todo porque antes de ellos, los adanes, no hubo nada. Hablaron de tolerancia, pero aparecieron las amenazas y los escraches a quien no pensase como ellos, también en la universidad. Convirtieron las redes sociales en una pesadilla en la que es mejor estar callado si no quieres que te destrocen decenas de troll con nombre de muñeca. Apalear un policía era un orgullo, utilizar la guillotina una costumbre, meter muertos en ceniceros una gracia y “colgar” jueces libertad de expresión. Saltarse las normas una diversión y okupar viviendas ajenas un derecho constitucional. Desde aquel 2014 todo ha ido a peor. Nos habéis enfrentado y dividido, tenemos más problemas y nos habéis instalado en el caos, nos habéis traído la peste social. Podéis iros por donde vinisteis. Por favor, cerrad la puerta al salir»

Jaime de Berenguer.

Cosecha del cincuenta

Niño, ¡apaga la luz, que está muy cara! La lámpara eran unos chupones de cristales que caían desde el techo y a las que, previamente, el padre había ido desenroscando, una sí, otra no, las bombillas para que no consumiera más de lo estrictamente necesario para verse las caras. A veces, se sustituían por velas, bien por la frecuencia con la que la luz desaparecía de pronto porque parece que se “calentaban” los cables que conducían la electricidad por la ciudad, bien para ahorrar aún más en la economía familiar, hasta que llegaba la hora de la cena en la que la madre enviaba al chaval a Casa de Marcelino, ¡niño, ves a la taberna y dile a padre que ya está preparada la cena! Con lo que el cabeza de familia conseguía un doble objetivo: No gastar luz en casa pues estaba en la taberna, y desahogaba sus meninges despotricando contra el Gobierno.

El chaval, espabilado como eran todos los de aquella época, responsable y consciente que tenía que empezar a asumir responsabilidades desde corta edad, se había acostumbrado a encender todas las mañanas el brasero con picón, reforzándolo por la tarde para que durase hasta el momento de acostarse; a que su madre le hiciera unos pantalones nuevos de unos viejos de su hermano mayor; a comer los lunes garbanzos, los martes lentejas, los miércoles patatas al caldillo, los jueves judías, los viernes bacalao “desalao” en diferentes representaciones, los sábados, que era el día en el que el padre cobraba la soldada que según el libro de Lengua Española del profesor Blecua era “el dinero que recibía regularmente una persona por un trabajo”, se comía “empedrado” y los domingo paella de arroz. La carne, en forma de pollo de corral, estaba reservada para Nochebuena y el día del cumpleaños de su padre. De cuando en cuando, iban al campo, a una casa muy grande que tenía un molino de aceite y todo, y allí le daban algunas cosillas a su madre, huevos, harina, aceite, tomates y pimientos, a cambio de los remiendos y ajustes que ella hacía a los vestidos de aquellos señoritos.

Su madre lavaba la ropa a mano, restregándola sobre una tabla de madera dentro de un barreño de zinc, manos prematuramente envejecidas, retorciendo la ropa con todas sus fuerzas para desalojar la mayor cantidad de agua posible que quedaba entre las prendas, que se tendían sobre unas cuerdas o alambres tensos de pared a pared, a secarse con el sol y recogerlas antes que llegara el raso de la noche, que dedicaba a zurcir los calcetines con un huevo de madera que se metía dentro de cada uno de ellos para “coger los puntos”, planchaba la ropa con una plancha de hierro que se calentaba sobre uno de los fuegos de la cocina económica y que tenía una asa, también de hierro, que se agarraba con una almohadilla bastante gruesa para no quemarse, mientras que con un paño se limpiaba el hollín con que se había impregnado la base de la plancha, la que descansaba sobre el agujero del fuego de la cocina. Se acostaba ya entrada la madrugada, con una bolsa de goma elástica que se llenaba de agua caliente para calentarse los pies, que se quedaban helados del trasiego de todo el día por la calle, el patio y la casa que, como hemos dicho antes, se atemperaba únicamente con el brasero encendido que se iba llevando de habitación en habitación para que se caldeasen un poco.

Antes, por la tarde, el chaval merendaba un bocadillo de pan del día anterior con una onza de chocolate López dentro, que más que chocolate parecía un trozo de tierra prensada y que si te lo comías de un bocado podías atragantarte con peligro de asfixia, o sardinillas en aceite o anchoas, también en aceite, que era lo más barato que había en aquella época. Y se iba a la calle a jugar con los amigos, sin miedo a que circulase ningún coche pues no había nada más que uno entre todos los residentes de la calle, ni peligro de ningún tipo que no fuera un chichón producido por una pedrada o al caerse jugando al futbol.

Siempre iban a jugar a la Plaza de San Francisco, que era un solar muy grande, de tierra, circundado por árboles, y donde podían dividirse varias pandillas de amigos en cualquier juego que quisieran sin entorpecer lo que los otros hiciesen. Ni que decir tiene que se conocían todos, de la escuela, de las actividades de los padres, que alguno de ellos iba detrás de las procesiones cuando salían en Semana Santa.

– Hoy he venido mi padre de Madrid en su coche oficial y nos ha traído gambas.

– ¿Gambas? ¿Qué es eso?

– Pues son como unos pececillos rojos, que están muy ricos, que pescan en el mar, muy lejos de aquí, y que le han preparado a mi padre entre un par de barras de hielo en una nevera muy grande.

– Claro como tu padre es el jefe de los Sindicatos y es el que hace el sorteo de las viviendas que construyen a los obreros  …

– Yo no sé nada de eso, solo que estaban muy ricas.

El domingo era día de descanso e iban al cine, por la tarde, a cincuenta céntimos -de peseta- la entrada, los padres tomaban una cervecita, y para casa, que había que levantarse temprano al día siguiente para ir a trabajar.

Antes de empezar la película siempre ponían otra peliculita más corta, con una música que era igual todos los domingos, en la que aparecía el Jefe del Estado diciendo lo bien que iba España, que Rusia era muy mala y la culpable de todos los males de España, que habían detenido a no sé cuántos sindicalistas ultras -el chaval no sabía lo que era eso, pero bueno, siempre lo decían- porque querían no sé qué contra el gobierno … Muchas cosas que él no comprendía, pero que aguantaba con pasión porque al final ponían los goles del Real Madrid en no sé qué partido de fútbol, y entonces todo el público en el cine empezaba a gritar y a aplaudir.

Esa era su vida hasta bien entrada la década de los sesenta, en la que alguien escribió aquella canción “Un gran hombre”, que decía: “Hay un país / Que la guerra marcó sin piedad. / Ese país / De cenizas logró resurgir. / Años costó / Su tributo a la guerra pagar, / Hoy consiguió / Que se admire y respete su paz. / No, no conocí / El azote de aquella invasión, / Vivo feliz / En la tierra que aquél levantó/ ….” Entonces ya podíamos comer tres platos abundantes todos los días, la gente pudo cambiar de casa, ir comprando, uno a uno y de forma espaciada, una catalítica, una cocina de butano, una televisión, una lavadora, ropa ya confeccionada, y hasta un coche Seat 600, que valía 60.000 pesetas, unos 360 euros actuales, un capitalazo …

Han pasado los años. Demasiados para “la cosecha del 50”, aquellos en los que la flor del cerezo luce de forma permanente en nuestra cabellera. Y resulta que hay que seguir lavando de madrugada porque el precio de la luz no te permite hacerlo a otra hora, como con Franco; hay que vestir de ropavejero, como con Franco; hay que bajar la temperatura de nuestros radiadores y calefacciones, como con Franco; no puedes comer carne, como con Franco; la culpa de todo la tiene Rusia, como con Franco; los sindicatos se movilizan a favor de mantener los impuestos a la luz y la gasolina, a sea, apoyando al Gobierno, como con Franco; se oculta la corrupción de algunos gobernantes, como con Franco; nos movemos en bicicleta y por caminos, como con Franco; falsificamos la firma de un magistrado del Tribunal Supremo enfermo de ELA en las sentencias, como con Franco; todos somos iguales ante la ley, menos unos cuantos, como con Franco; los hombres y las mujeres tienen los mismos derechos y obligaciones, menos cuando las ucranianas tienen que ir a la guerra, como con Franco; se despenaliza las coacciones y actuaciones violentas de los piquetes sindicales, pensando en que son la voz del que manda, como con Franco; pero si hay algún sindicato contrario al régimen gobernante, es ultra y se envían a mil policías a “poner orden”, a dar tranquilidad, de tranca, como con Franco; se inventa la “economía de la felicidad”, no comemos, pero somos felices, como con Franco; las secuoyas tapan el bosque con la peliculita del jefe de Gobierno en televisión, como el NODO con Franco; y dirán que yo escribo en contra del gobierno, como con Franco.

Antonio CAMPOS

Que no se nos olvide nunca

Marzo de 2021. Se pronuncia la mitad del Gobierno de España sobre los graves sucesos de Barcelona, tras el encarcelamiento de un rapero por enaltecimiento del terrorismo. Éstas son las palabras del diputado Echenique alentando a la chusma antisistema que, durante diez jornadas consecutivas, mantuvo en jaque a la policía, quemó neumáticos y contenedores, rompió escaparates y mobiliario municipal, asaltó comercios y casas particulares, rodeó comisarías e hizo una feroz guerrilla urbana en el centro de Barcelona:  

<<Todo mi apoyo a los jóvenes antifascistas que están pidiendo libertad de expresión en las calles>>.

Marzo de 2022. Se pronuncia el Gobierno de España sobre las protestas de diversos colectivos ciudadanos por los insoportables precios de la gasolina, del gas y de la electricidad. Éstas son las palabras de desprecio de varios ministros hacia los camioneros, taxistas, agricultores, ganaderos, cazadores, comerciantes, autónomos, industriales y transportistas que están quejándose pacíficamente en las calles de la insostenibilidad o ruina de sus negocios:

<<La ultraderecha está detrás de estos paros>>.

Que no se nos olvide nunca la doble vara de medir de este Gobierno para sus gobernados: son “ultraderechistas” las buenas gentes madrugadoras; son “luchadores de la libertad” los quemacontenedores de Barcelona. 

Que no se nos olvide nunca cómo el Gobierno comparte afectos (cuando no complicidad) con los colectivos más letales para nuestra democracia: con los violentos, los incendiarios, los malotes, los golpistas catalanes, los antiguos etarras, los okupas, los vendedores de humo, los antisistema, los parásitos sociales, los revientamítines, los del ininteligible lenguaje perroflautico, los Rodrigo Lanzas, los Pablo Hasel, los del “arderéis como en el 36”. 

Y que no se nos olvide nunca cómo el Gobierno reparte sospechas, desprecios y adjetivos descalificativos entre las personas honradas, decentes y trabajadoras. Entre quienes pagan religiosamente sus impuestos. Entre quienes madrugan para ir a trabajar. Entre quienes producen riqueza para sí mismos, para los demás y para el conjunto del país. Entre quienes nunca salen a la calle a molestar a sus vecinos salvo que quiebren sus empresas o dejen de comer sus hijos.

Que no se nos olvide nunca lo que acabo de escribir.

Que no se nos olvide nunca.

Firmado:

Juan Manuel Jimenez Muñoz.

Médico y escritor malagueño.

Los 3 problemas que resquebrajan la economía española

según Niño Becerra

Publica el libro ‘Futuro, ¿qué futuro?’, donde analiza hacia dónde va la economía postcovid

Por Lluís Bou en Elnacional.cat

El economista Santiago Niño-Becerra acaba de publicar el libro Futuro, ¿qué futuro? (Editorial Ariel), donde analiza la economía después de la pandemia de la covid, con especial atención a España. Niño-Becerra advierte que el Estado español tiene tres problemas económicos que lo coartan: la deuda desmesurada, la baja productividad y la escasez de dinero para las pensiones. Estas son las valoraciones que hace el economista sobre estos tres puntos, que resumimos a continuación. «Los tres años que se calcula que la pandemia tardará en ser controlada serán una piedra en un camino-económico, el de nuestro país, que ya era escabroso, sobre todo pensando en el medio y largo plazo», advierte.

1) Deuda desmesurada: Según el economista, «la deuda es un dogal muy pesado que asfixia a España y que hace que el país dependa de los inversores que tienen esta deuda». Y en este sentido, pronostica que a consecuencia de ello el Gobierno español tendrá que adoptar medidas duras como subir impuestos, recortar el gasto público, o combinar las dos vías para que la evolución de la deuda sea sostenible. «España pasó de una deuda del 95,5% del PIB, a 31 de diciembre del 2019, al 120% del PIB un año después», recuerda, en un proceso acelerado por la covid. Pero Niño Becerra avisa de que la covid sólo ha empeorado unas tendencias que ya eran malas antes de la pandemia. «La pandemia ha afectado a España más que a otras economías por problemas que venían de muy atrás, que ya estaban antes de que el virus de la covid llegara; el virus sencillamente los ha dramatizado y puesto en evidencia. La española no es una economía homogénea: por eso pienso que la única posibilidad de recuperación para España y el resto de países pasa por finalizar la fórmula del café-por-todos y optar por un perfil de geometría variable que, hasta ahora, se ha querido evitar por razones políticas», añade.

2) Baja productividad: El economista asegura que los índices de productividad españoles han empeorado en los últimos años, y ya no eran buenos antes. Eso a su entender acondiciona toda la estructura económica. «Una baja productividad supone una generación de valor añadido reducida, lo que no incentiva la inversión a fin de que la productividad mejore, y eso lleva de forma inevitable al país o zona a perder competitividad internacional. España ha estado compensando esta deficiencia pagando salarios bajos y con condiciones laborales precarias: tiene además una tasa de economía sumergida que, según las estimaciones, oscila entre el 17% y el 25% del PIB, lo cual ha soportado con bastante elasticidad el sector turístico», apunta. Niño Becerra advierte que esta fórmula no será sostenible en el tiempo, porque la UE exigirá y auditará fórmulas fiscales mucho más estrictas.

3) Escasez de dinero para las pensiones: El economista asegura que España sufre una «crónica insuficiencia» de dinero para las pensiones, e insiste en que este es el problema real. «El problema del sistema de pensiones de España (y de todos los países con un sistema de reparto como el español) es de insuficiencia de ingresos», dice. Según Niño Becerra, la ley de reforma de la Seguridad Social aprobada en anteproyecto en el 2021 sólo garantiza «un equilibrio momentáneo de las cuentas» traspasando algunos gastos a los presupuestos del Estado, para aportar así 22.000 millones de euros más, que se quitan de otras partidas. A su entender, el anteproyecto «aparca para más adelante los temas más polémicos, como el encaje del aumento de la esperanza de vida en el importe de las pensiones». La cuestión también se ha agravado a raíz de la pandemia.

De Zapatero a Sánchez – Arquitectos universales

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado a bombo y platillo que el Sahara Occidental es parte integrante de Marruecos, y que el tratamiento geopolítico correcto para ese territorio es el de una Autonomía del país marroquí.

Si además de vivir como personas movientes, pero no pensantes; de votar con el corazón y no con la cabeza; de no ver el peligro antes que llegue, fuéramos previsores, analizáramos los pequeños detalles, que son los que en conjunto hacen una nación próspera y poderosa, nos hubiéramos dado cuenta de que desde hace unos años la España actual está diseñada por dos arquitectos del universo que, como la ranita en la olla, nos están elevando la temperatura corporal hasta que muramos por asfixia.

Zapatero, elegido Secretario General del PSOE en último memento con ocho votos de otros tantos masones, amigo íntimo de Venezuela, que dejó la nación en quiebra técnica cuando ganó Rajoy las elecciones, dejó plantada la semilla de la destrucción socialista, lo contrario a lo que había realizado Felipe González que, con sus defectos y pasajes oscuros, modernizó el país, lo puso en Europa, insufló confianza y motivación a la ciudadanía, y contribuyó sin reserva de ningún tipo a olvidar el pasado y al reencuentro de todos los españoles.

A poco de llegar a la presidencia del Gobierno Zapatero, comía yo un día con un general, ya fallecido, en Casa Lucio, a la vez que lo hacía SM Juan Carlos I en un comedor anexo, protegido por varios guardaespaldas repartidos en varias mesas cercanas. El general me dijo: “Zapatero quiere desenterrar a los muertos y ganar la Guerra Civil sin dispara un tiro. Y este -refiriéndose al Rey- o no se da cuenta o se hace el Borbón”.

En cualquier caso, incluido atentado 11-M sobre el que los servicios secretos marroquíes han filtrado hace muy poco que “podrían hacer pública la verdad de lo ocurrido” y que el juez Bermúdez, que sentenció el caso en su día dijo que «La verdad del 11-M es tan terrible que España no está preparada para conocerla», la fotografía que ilustra este artículo, obtenida de internet, es muestra inequívoca del futuro que el Sr. Zapatero tenía previsto para España y, en este caso, para el pueblo saharaui.

España siempre ha alentado el Sahara como nación independiente, incluso provocando una crisis diplomática por haber acogido como refugiado al secretario general del Frente Polisario, Brahim Gali, idea podemita comparable a que Cataluña y Euskadi pudieran ser países independientes, desencadenando la “invasión silente” en mayo 2021 por parte de más de ocho mil personas que llegaron a nado desde Marruecos a Ceuta, en una táctica similar a la de La Marcha Verde del año 1975, aprovechando la debilidad de España en los últimos estertores de Franco. Esos ilegales llegados a Ceuta ocuparon cuatro colegios, incendiando uno de ellos, se produjeron asaltos a viviendas y comercios, diversos medios de comunicación hablaban de nueva avalancha de personas desde diferentes sitios de Marruecos hacia Ceuta, y al ministro Marlaska, el Árbitro de Las Cortes, no se le ocurrió otra cosa que decir que “se perseguirán todos los delitos de odio respecto a esta crisis con Marruecos”. Y en vez de defender nuestras fronteras, prohibimos a la policía y guardia civil que use sus armas y sean comprensivos con ellos, mientras ordenamos que a los huelguistas del transporte se les llame activistas y que la policía utilice sus porras y defensas con total contundencia.

Desde entonces, no ha cesado la avalancha de ilegales, jóvenes, bien nutridos, con dinero en el bolsillo, buenos relojes y mejores teléfonos, que más que refugiados parecen soldados vestidos de paisano, a Ceuta, Melilla y Canarias, en dos de cuyas islas se han convertido en dueños y señores de la calle, todo ello al albur de la debilidad de una España desunida, enferma, en dificultades económicas, con un gobierno social-comunista único en el mundo democrático y en clara desventaja en material bélico, en calidad y en cantidad, a lo que hay que unir el apoyo de todo tipo que está recibiendo Marruecos de Estados Unidos, que está haciendo lo mismo que en su día hizo con España en la segunda etapa franquista: Establecer sus bases en un país semidemocrático, o dictatorial con aspecto de voto si ustedes lo quieren así llamar, sin problemas sociales, barato en mano de obra y terrenos dónde instalarse, con ayudas locales de todo tipo y colaboración absoluta y sin reparos del poder político. Eso, ¿está bien o mal? No lo sé. Lo único que sé es que esa es la realidad, en la que España queda postergada por las Ninotchkas actuales que “han viajado de las cabras a las uvas demasiado deprisa”.  

Como cada día se van conociendo más cosas, entre ellas las relaciones mantenidas por políticos catalanes para que Rusia -la de Lenin, Stalin, La Pasionaria, la del PCE, la de Podemos- interviniese incluso bélicamente para que Cataluña se independizara de España, como el presidente de Estados Unidos Joe Biden considera a Pedro Sánchez -otro arquitecto nacional- una marioneta movida por hilos marxistas y no cuenta con él para nada, como cada día se pone más proceloso que Marruecos invada y se apodere de Ceuta y Melilla, como las encuestan vaticinan que nunca volvería a tener una mayoría absoluta en unas elecciones generales, como Marruecos nos aplastaría militarmente en un par de semanas porque eso de la OTAN ha quedado demostrado en la actual guerra Rusia-Ucrania que no sirve como ejército si no se trata de guerra nuclear, pues -el miedo es libre- reconocemos que el Sahara Occidental forma parte integrante de Marruecos, a la vez que provocamos una crisis diplomática con Argelia que de esa sí que dependemos en materia del gas licuado y no de Rusia como se nos está haciendo creer. Y a ver qué Comité de Crisis creamos porque el anterior estuvo formado por Pedro Sánchez (“Lo que yo digo, lo cumplo”), Carmen Calvo (“Deseo que la UNESCO legisle para todos los planetas”), Marlaska (“Hay una palabra que no conjugaré nunca: injerencia”), González Laya (“O el virus mata a Europa o Europa mata al virus, tenemos que elegir”), Miguel Iceta (“Vuelve Mariano, quítanos al fraCasado”) e Ione Belarra (la que quiere “socializar” 200.000 viviendas privadas).

Zapatero, volvemos al inicio del mal, ha declarado que «es una postura inteligente» y le sorprende que se hable de «un cambio o giro» porque la propuesta de la «amplia autonomía» del Sáhara ya se la presentó Marruecos en 2007. Lo dicho, hay que estar más atentos a los pequeños detalles, porque en caso contrario únicamente puede pasar que nos sodomicen, que a alguno le gustará.

Antonio Campos

Concursos de acreedores

Cuando un deudor no tiene capacidad para pagar la totalidad de sus deudas, existe la posibilidad de acogerse a un concurso de acreedores, pudiendo continuar con la actividad económica a través de otras alternativas de pagos. Pueden declarar el concurso, el propio empresario en un plazo de 2 meses desde que conozca su insolvencia, llamándose así concurso voluntario; si quien solicita el concurso son los acreedores que hayan intentado cobrar un crédito sin conseguirlo o los socios de la propia empresa, nos encontramos ante un concurso necesario.

Todo ello se recoge en el Real Decreto Legislativo 1/2020, de 5 de mayo, por el que se aprueba el Texto Refundido de la Ley Concursal, ley del año 2003 que derogó leyes vigentes de los años 1869, 1904, 1912, 1917, entre otras muchas, modificada varias veces desde su publicación, clara señal que no cumple con los objetivos inicialmente previstos porque la falta de liquidez en las empresas que se acogen a Concurso tiende a aparecer en una fase final, próxima a la suspensión de sus compromisos de pago, y se origina en empresas que, si bien históricamente han tenido una evolución comercial positiva, sus estructuras de pasivo, fuertemente endeudadas, les hace más vulnerables a situaciones de recesión o crisis económica; esa tardanza en acogerse a situación concursal hace que el deterioro económico sea muy importante y muy pocas consiguen volver a posiciones de viabilidad y, estadísticamente, aproximadamente el 90% de ellas terminan en liquidación.

El concurso es la situación jurídica más desfavorable para los acreedores. La Ley de Segunda Oportunidad concluye en exoneración de deudas concursales una vez liquidado el patrimonio del deudor, y uno de los que se queda sin cobrar es la Hacienda Española, o sea, todos los ciudadanos de este país. Como decía Forges “Cuando un fundrio se escabondra, algo tuyo se escabondra”.

La estadística empezó a realizarse en 2005, sustituyendo a la Estadística de suspensiones de pago y declaraciones de quiebra, que dejó de realizarse con la entrada en vigor el 1 de septiembre de 2004 de la Ley Orgánica 8/2003, para la Reforma Concursal, y de la Ley 22/2003, Concursal. Según lo dispuesto en el Plan Estadístico Nacional 2021-2024, el Colegio Oficial de Registradores de la Propiedad y Mercantiles de España elaborará esta estadística a partir del primer trimestre de 2021.

En página anexa a la presente, datos refundidos por el autor en función de las fuentes que se citan, se recogen los concursos de acreedores desde los años 2005 al 2021, ambos inclusive, por Comunidades Autónomas, número de deudores mercantiles y particulares sin actividad comercial, y referencias a la morosidad bancaria, inflación, paro, Deuda Pública Española, tipos anuales medios del Euribor e índice IBEX de la bolsa.

Si bien el estudio completo de los datos que se apuntan nos llevaría a una reflexión que trasciende la de este artículo, destacamos:

  • Los concursos presentados por personas físicas sin actividad empresarial se han incrementado de forma exponencial a partir del año 2018, habiendo alcanzado el máximo en el año 2021 hasta el 58,91% de los presentados por personas físicas y jurídicas que desarrollan actividad empresarial, representado el 37,00% del total de concursos en el año. El moroso ha encontrado la fórmula perfecta para que el banco se dé por pagado con la entrega del bien hipotecado por liquidación del concursado.
  • La morosidad bancaria corre pareja al paro existente en el país. Si nos centramos en los años 2020 y 2021, las cifras no reflejan la realidad de una forma fidedigna, pues los ERE, ERTE, ayudas del Ejecutivo, refinanciaciones y el Real Decreto-ley 8/2020, de 17 de marzo, en su artículo 43, procedió a suspender temporalmente el deber de solicitar la declaración de concurso por el deudor insolvente (mientras estuviere vigente el estado de alarma), a la vez que, también de forma temporal (durante el estado de alarma, hasta transcurrir dos meses a contar desde la finalización de este), se preveía la inadmisión a trámite de las solicitudes de concurso necesario. “La norma fue derogada por otra posterior, Real Decreto-ley 16/2020, de 28 de abril, que extendía sus efectos hasta el 31 de diciembre de 2020. Posteriormente por medio de la Disposición Final Décima (tercer punto) del Real Decreto-Ley 34/2020, de 17 de noviembre, esta extensión se prorrogó hasta el 14 de marzo de 2021. En 2021, el Real Decreto-ley 5/2021, de 12 de marzo, en su apartado cuarto de la Disposición final séptima, habilitó una nueva prórroga hasta el 31 de diciembre de 2021. Y con posterioridad, el Real Decreto-ley 27/2021, de 3 de noviembre, por el que se prorrogan determinadas medidas económicas para apoyar la recuperación, se habilita una nueva moratoria hasta el próximo 30 de junio de 2022”. Fuente: Informe Registradores de España, cuarto trimestre 2021.

Si a ello unimos los problemas derivados de la guerra Rusia-Ucrania, la inflación de dos dígitos esperada para el presente año 2022, la subida de tipos de interés que antes o después tiene que llegar -yo creo que para finales de este año- pues no es de recibo que los particulares paguen unos tipos superiores al 6% en créditos de financiación del circulante y los países se financien a tipo cero mediante la puesta en funcionamiento de la fotocopiadora de deuda europea, el despilfarro en chorradas ideológicas que se están haciendo de los fondos europeos en vez de hacer viviendas sociales, pantanos, centrales nucleares, salvar a las empresas viables por sí mismas a futuro e invertir en nuevas tecnologías, es previsible que estos dos factores -paro y morosidad- se incrementen de forma importante a partir de ahora.

Porque, además, el presidente Pedro Sánchez no admite sus errores, sigue echándole la culpa a Franco, al coronavirus, a la “pertinaz sequía” y ahora a la guerra ruso-ucraniana de los males de la economía española, y dota al ministerio de chochobobadas el triple de dinero que a los de Sanidad, Industria o Investigación, el cuádruple que al de Educación y diez veces más que a los de Justicia o Cultura. Así, la inversión huye de España y las empresas seguirán presentando concurso.

Y eso que los datos actuales están blanqueados por el cambio realizado por el Banco de España en la contabilización de las operaciones bancarias morosas que, si bien han reforzado la solvencia de las entidades, ha enmascarado la tasa de morosidad bancaria.

  • La tasa de inflación histórica del periodo analizado ha sido:
  • Siempre son tres las Comunidades Autónomas que presentan mayor número de concursos, Cataluña, Madrid y Valencia, por ese orden. En conjunto, en el año 2020 fue del 60,00% y en 2021 el 61,47% del total. Cataluña tiene el 29,81% y el 32,66% respectivamente.
  • De los datos aportados se observa claramente que la Bolsa española no ha tenido revalorización ni ha superado la crisis de las hipotecas subprime, en la que el IBEX acabó el año 2007 en 15.182,30 puntos, en el que la economía española acumulaba catorce años de crecimiento económico ininterrumpido. Fueron años en los que nuestro país alcanzó el objetivo de incorporarse a la Unión Económica y Monetaria (UEM) desde su inicio, en 1999, tras cumplir con los criterios exigidos de estabilidad de precios, tipos de interés, tipos de cambio y sostenibilidad de las finanzas públicas. Han pasado quince años y estamos prácticamente en algo más de la mitad de esos precios. Y seguimos sin aprender, pues hay bancos que vuelven a conceder el cien por cien de las forzadas tasaciones que se les presentan, en una economía en la que los únicos que tienen seguro el puesto de trabajo son los funcionarios y los curas.
  • Lo peor de todo es que si analizamos en profundidad el conjunto de datos aportados, lo mismo da quién gobierne, todos lo han hecho muy mal. Se ha antepuesto la ideología y la política a la recuperación económica verdadera, manteniendo de forma artificial sectores anquilosados, deficiente formación académica y profesional que lo único que produce es aumento de personas subvencionadas por diferentes sitios y niveles, se mantienen empresas zombis e imposibles de recuperación futura, salvo en Madrid, las comunidades con más concursos son aquellas que tienen un marcado acento separatista, a las que se les facilita más dinero que a las otras, pero que no destinan a economía productiva, grandes mentes económicas han dirigido el ministerio de Economía, pero han sido rápidamente absorbidos por teóricos mequetrefes económicos, se han diluido como azucarillo en agua, y con ellos, el bienestar de los primeros años de la Transición.
  • Quisiera ser optimista, pero no veo capacitación en el actual gobierno para solucionar la situación de emergencia económica nacional a la que estamos abocados, para cambiar palabras huecas y mentiras flagrantes por realidades tangibles, para devolver la confianza y motivar a los ciudadanos, para ser humildes y convocar a los mejores profesionales en economía, del sexo, del color y del partido que sean, para reconstruir la Pirámide de Maslow por la base, las necesidades básicas para la supervivencia, dejando las de reconocimiento y autorrealización -que es en lo que anda nuestro presidente- para cuando el cuerpo esté saciado y resguardado en una vivienda, pues mirarse en un espejo y autoproclamarse guapo de verbena no sirve para nada si uno no come ni duerme bajo techo.

Antonio CAMPOS

11-M

Por Isaac Palomares

Dia 11 de marzo de 2022, 18 años después de uno de los atentados más duros y sangrientos de nuestra Historia.

Esta noche quiero hacer una reflexión que sé que a muchos no va a gustar.

Hoy escuchaba una frase: «pacto de la infamia» por el acuerdo entre PP y VOX en Castilla y León.

Ya sé que en estos tiempos lo más fácil es seguir la corriente de los tiempos, de los que tienen el poder, pero yo no pienso hacerlo.

Pacto de la infamia es única y exclusivamente el que existe con Bildu, con los amigos y compañeros de los etarras, con los independentistas golpistas que en 2017 intentaron destrozar nuestro país.

Es muy fácil para muchos de vosotros llamar nazis a los integrantes de VOX, pero os voy a decir que no se han comido ni se comen a nadie.

Los únicos que han asesinado son los etarras, los únicos que han dado un golpe de Estado son los independentistas catalanes.

Sinceramente, muchos de vosotros, independientemente del color político, siempre dentro de la democracia, tenéis amigos, tenéis familiares, tenéis paisanos que han muerto bajo las balas y las bombas de ETA, y aun así os dejáis seducir por esa frase de pacto de la infamia.

Lo más fácil es callar, lo más fácil es seguir el dictado de los que hoy por hoy nos llevan al desastre.

Me siento triste de que no pase nada ante una foto con bilduetarras , con los golpistas independentistas que intentaron romper España, que arrojaban piedras y todo tipo de objetos a los Mossos de Escuadra, a la Policia Nacional y a la Guardia Civil.

Muchos de vosotros que ahora calláis o aplaudís, en aquél momento aplaudíais a nuestros miembros de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad cuando iban a Cataluña a luchar contra un referendum ilegal que nos quería hurtar la democracia y el Estado de Derecho. Muchos de vosotros llorabais cuando asesinaban a más de ochocientos sesenta seres humanos, entre ellos 22 niños, muchos de vosotros os manchabais las manos de blanco cuando ejecutaron de forma vil y cruel a Miguel Angel Blanco….

Yo siempre estaré con las víctimas, yo siempre estaré con la Guardia Civil, con nuestra Policía Nacional, nuestros militares, porque ellos son los garantes de nuestra democracia, son los que cuando hay problemas o la cosa se pone fea , están ahí dando la cara y la vida por los demás sin preguntar por la ideología.

Sinceramente os pido que os lo hagáis mirar, y quiero decir alto y claro que siempre estaré con Maite Araluce, con MIguel Folguera, con Angeles Pedraza, con Marimar Blanco Garrido, con Consuelo Ordoñez, con todos los que siguen luchando por los  que merecen la pena. MEMORIA, VERDAD, DIGNIDAD Y JUSTICIA. ¡¡¡VIVA ESPAÑA¡¡¡¡ VIVA EL REY¡¡¡

Cui prodest?

Pablo Casado ya es historia en la política española. Ha pecado de pardillo, dejándose aconsejar mal y siendo engañado por unos y por otros, debiendo rectificar por mi parte la filtración a la que hacía alusión en mi anterior artículo “Nuestros políticos y el Principio de Peter”, que atribuía al Ministerio de Hacienda, pues la realidad es que fue un empleado bancario el que rompió el secreto profesional. Lo siento, me equivoqué, que dijo aquel.

 El presidente del PP, en vez de tener cerca a Isabel Díaz Ayuso para vigilarla y controlarla, procuró hacer públicas sus desavenencias para demostrar quién era el jefe, quién mandaba, y ha perdido la partida de una forma estrepitosa.

Pablo Casado alcanzó su nivel de incompetencia cuando se rodeó de gente mediocre bajo la vara de mando de un capataz sin escrúpulos, formando un tándem que nunca había subido una cuesta empinada ni andado por caminos pedregosos, pensando que era el retorno a casa del César romano al que perfumaban su carro con pétalos de rosas.

No me explico como el Sr. Casado, con los cientos de casos y miles de millones de euros mal gastados por el Gobierno en tiempos del coronavirus, no ha ejercido el control parlamentario, o en los medios de comunicación como hace PSOE y Podemos, en temas raros, oscuros, nunca explicados, a empresas y precio ilógicos que dejan lugar a pensamientos impuros que decían los curas cuando yo era niño, al alcance de cualquiera que quiera documentarse en una hemeroteca, y en cambio se ceba con una compañera de partido elogiada por todo el mundo, incluidos prestigiosos periódicos internacionales, de cuyo éxito él debería ser el principal beneficiado. Otro que pasó por Bilderberg y allí, como los Sacramentos de la Iglesia Católica, se imprime carácter.

La vida da muchas vueltas y en este caso, una vez más, se ha demostrado que, para ocupar un puesto, cualquiera, el que sea, hay que llegar con la lección aprendida, estar preparado, no basta con ser un buen chaval que acepta con agrado cuantas indicaciones se le formulan, que decía un cabroncete conocido mío.

Cuánto antecede no es óbice para que los ciudadanos españoles debamos darle las gracias porque en un país en el que jamás se conjuga el verbo dimitir y renunciar a la canonjía política de turno, aunque empujado por quienes ven peligrar su sillón de cuero, él lo ha hecho, con dignidad, con un discurso comedido y aceptando una situación que cualquier otro hubiera intentado, y conseguido, darle la vuelta con cualquier excusa o escorzo a los que otros personajes públicos nos tienen acostumbrados.

“La pregunta clave de los jueces sagaces ─desde Salomón a Sancho Panza─ es cui prodest?, esto es, “¿a quién beneficia?”. Es la mejor manera de interpretar las conductas raras”, escribió Amando de Miguel. Cada uno tenemos nuestra opinión, pero será el paso del tiempo el juez que dicte sentencia.

Va a sucederle como presidente del Partido Popular Alberto Núñez Feijóo, funcionario de carrera en el Cuerpo Superior de la Administración General de la Xunta de Galicia, desde dónde pasó directamente a la política.

Es un político avezado, con el colmillo retorcido, que no sabes si sube o baja, nacionalista gallego que, sin aspavientos de ningún tipo, empezó a rotular en gallego y no en castellano las rúas, museos y organismo públicos, denunciado por incumplir las medidas a favor del español del propio programa de su partido, que privilegia (el privilegio no es signo de igualdad) a los transexuales en los incentivos para la contratación y apoya imponer la “perspectiva de género” en los planes de salud, que se siente cerca ideológicamente de la “nación de naciones” del BNG y propone aislar a VOX de la política por no incomodar a los que cantan la Internacional con el puño cerrado, que retiró el monumento a Juan Pablo II en el Monte del Gozo del Camino de Santiago, que ha declarado en varias ocasiones que lo ideal sería un “entendimiento” entre PSOE y PP (¿alternancia en el gobierno como en tiempos de Alfonso XII por parte de Cánovas, presidente del Partido Conservador, y Sagasta, presidente del Partido Liberal, turnos en el poder a través del caciquismo?) y cuyo primera señal de alerta ha pasado desapercibida para el gran público y es la alianza entre ambos partidos para retrasar el debate de la bajada de impuestos en la CCAA de Madrid, a propuesta de VOX, en la adquisición de la primera vivienda, preboste de un territorio pacífico y sin incidencias dignas de mención y que no tiene que alzar la voz para que se haga lo que él allí ordena.

Va a ser elegido por aclamación teledirigida como últimamente lo son los de todos los partidos, se ha dejado querer como salvador de la centroderecha española, cuando hemos comprobado -UCD, CDS, UPyD, CD- que al centro no lo vota nadie, pensando en cambiar todo el equipo dirigente y tratando, ha dicho textualmente, obtener desde el voto de “izquierda no radical” a la “derecha tranquila”, aglutinador de todo lo que no sea marxismo o comunismo. No ha llegado todavía a Madrid y el Gobierno ya le ha conminado a demostrar su «sentido de Estado», renovando el CGPJ y aislando a Vox, que les ha encendido “el cagómetro” como dice el periodista Tomás Guasch.

Las personas procedentes de la dirección de las comunidades autónomas, de todos los signos y condiciones, están muy marcadas por su pasado, los íntimos amigos desde la infancia, las mujeres van a la misma peluquería, coinciden en bares y restaurantes, en entregas de trofeos, obras de teatro y fiestas de cumpleaños de los hijos, en gustos, vacaciones e incluso en fotografías y reportajes que, de cuando en cuando, se vuelven en contra de los protagonistas, en historias financieras que algún día alguien sacará a la luz, como el apoyo incondicional que Feijóo mostró ante Rajoy para que se vendiera a una persona en concreto NCG, la Caja que recibió 9.000 millones de euros como ayudas públicas a fondo perdido, y que aportó 14.605 millones de euros (el 10,15% del total) en operaciones deterioradas a la SAREB, para que los depositantes gallegos no se quedaran sin sus ahorros, y las circunstancias que en ello concurrieron.

¿Es Núñez Feijóo líder para aglutinar y representar a todos aquellos que votan o pensaban votar al Partido Popular? Cayetana Álvarez de Toledo, asesinada por Pablo Casado por decir la verdad de forma políticamente incorrecta y que es un cadáver criogenizado en espera de resurrección futura, ha dicho que es válido para pilotar la “fase de transición” en su partido porque “es el adulto en esta etapa de puerilidad”.

España necesita dos partidos políticos fuertes, pero no para alternarse y llenar sus faldriqueras en periodos preestablecidos, sino para controlarse, para que se cumplan los programas, las promesas, para que los que salgan tengan las manos tan limpias como cuando entraron, para gobernar para todos los ciudadanos españoles y no únicamente para quienes beneficio y subvenciono de una forma interesada para que me voten a mí y siga siendo político profesional toda la vida.

Bienvenido sea el Sr. Feijóo a la política nacional y aunque ha toreado en muchas plazas de su taifa, en Madrid deberá presentarse destocado y sabiendo que los toros son morlacos, tienen los cuernos astifinos y cornalones, y embisten a la franela sin saber quién es el torero, que dos orejas cortadas en cualquier coso gallego no pasan de ser respetuoso silencio en la Ventas madrileñas.

Y de Isabel Díaz Ayuso, ¿qué? Pues que Feijóo sabe que es mejor que sea amiga que enemiga, que tiene más seguidores en los medios de comunicación de internet que Pablo Casado, que Egea y que él mismo, que los triunfos de ella serán los triunfos de él, que ha convertido Madrid en la comunidad económica que más aporta a la nación, que tiene contentos a trabajadores y empresarios, que tiene las ideas muy claras y que es mejor que luzca a su lado que por sí sola. Que se vigilarán mutuamente y ella tendrá que esperar futuros acontecimientos, que todavía es joven.

Todo ello en dónde los líderes reales van a ser Pedro Sánchez por el sanchismo (obsérvese que no menciono socialismo ni socialdemocracia felipista), Yolanda Díaz por el comunismo Loewe, Feijóo por los populares y Abascal por VOX, a los que hay que añadir los independentistas catalanes y vascos, que son los que mantienen en el poder a los otros a cambio de la destrucción de España como nación.

Antonio CAMPOS

Publicado en PUERTA DE MADRID de Alcalá de Henares el 11-03-2022