Desde el rio hasta la mar

Como miembro del Gobierno de España, se encuentra Sira Abed Rego, ministra de Juventud e Infancia, de 50 años, nació en Valencia, hija de padre palestino y madre española. Pasó su infancia en un pequeño pueblo cercano a Jerusalén, su padre y sus hermanos siguen viviendo en Cisjordania. Diplomada en Nutrición. Es afiliada al Partido Comunista, CCOO y a Ecologistas en acción. Vive en Rivas-Vaciamadrid, el «pueblo rojo» cercano a Madrid.

Toda su vida ha estado ligada a la política, pues antes de ser «profesional» de ella, el único trabajo que se le conoce es en una cooperativa en proyectos relacionados con mujeres y planificación, salud sexual y reproductiva, algo que huele desde fuera a organización subvencionada.

Desde hace años se ha distinguido por frases y posicionamiento político claro, contundente, a favor del comunismo, del pueblo palestino, de la libertad de la mujer y de los derechos de la infancia. Eso, aquí, en España, porque no he encontrado dato alguno de por qué su familia parental permanece en Cisjordania, tan alejada pero tan cerca de su corazón, y no va allí a defender lo mismo que trata de imponer aquí.

Marzo 2012: Tachó a España como una estafa y calificó a Venezuela como una democracia.

Mayo 2012: «Viva la clase obrera ¡Vivan las personas rebeldes que luchan! ¡Viva Lenin! Viva Marx».

Año 2019: «Decir que Lenin es un genocida, además de evidentemente de expresar que usted es una persona de extrema derecha, lo que expresa es que usted ha leído muy poco de historia universal, en general». No sé si sabrá, o también miente deliberadamente como quién la ha nombrado ministra, que Lenin abrió 82 campos de concentración en Rusia y asesinó a un millón de personas, entre ellos veinte mil religiosos.

Junio 2022: Participó en las protestas durante la cumbre de la OTAN organizada por España en Madrid, con el lema y charlas de «Cumbre por la Paz: OTAN no».

Septiembre 2022: Fue uno de los 16 eurodiputados que votaron en contra de condenar al presidente Daniel Ortega de Nicaragua por violaciones de los derechos humanos, en particular la detención y condena a 26 años de cárcel del obispo Rolando José Álvarez Lagos por su oposición a la dictadura.

Septiembre 2023: En el Parlamento Europeo votó en contra del posicionamiento de la Unión Europea ante la deportación forzosa por el ejército ruso de más de 2.000 niños ucranianos desde su país a campos de rusificación en Bielorrusia.

Octubre 2023: De los 705 miembros que componen la Cámara Europea, todos votaron a favor de condenar la masacre de los 1.400 israelíes perpetrada por terroristas de Hamas el 7 de octubre pasado, excepto 21, uno de los cuales fue esta señora, que esconde su primer apellido árabe en sus comparecencias en España. Otro de esos votos negativos fue el de Ernest Urtasun, actual ministro de Cultura.

El 10 de octubre, tan sólo cuatro días después de la masacre cometida por Hamas en Israel, mantuvo un encuentro con Husni Abdel Wahed, el Embajador de Palestina en España, a quien le expresó «todo nuestro apoyo» … «La paz solo puede llegar con el fin de la ocupación israelí».

En ese cortijo privado que la política quiere convertir a España en el que todo está permitido siempre que Pedro Sánchez se perpetúe en el poder de forma indefinida a imagen y semejanza de los nuevos dictadores mundiales blanqueados bajo pátina democrática, esta señora se ha manifestado de forma pública como una talibana comunista e ideóloga de una regeneración de raza al estilo de los usos que llevó a cabo el dictador Hitler.

            Sus manifestaciones «desde el río hasta la mar» es la frase empleada por los islamistas radicales que quieren eliminar el estado judío desde el río Jordán al mar Mediterráneo, lo que es lo mío, acabar con el pueblo judío como pretendió hacer el genocida Hitler.

            Esta actitud va más allá de cualquier sentido humanista, haciendo bandera del odio y de la aniquilación de todo un pueblo que, con sus virtudes y defectos, es la vanguardia técnica mundial y el único país asiático que elige democráticamente a sus dirigentes. Sus palabras traspasan cualquier transgresión diplomática internacional y únicamente pueden provocar problemas a España y, a lo peor, a alguno o algunos de sus políticos más relevantes.

            Todo ello en un contexto en el que se quiere reconocer un Estado sin tener delimitadas sus fronteras, sin exigencia previa de la desaparición absoluta de todo grupo terrorista, sin el establecimiento de zona desmilitarizada y sin el concurso de fuerzas internacionales que garanticen la paz, o sea, un Estado virtual similar al que se nos pretende vender para ciertas regiones españolas, independiente para unas cosas pero subvencionado por aquellos a quienes odian y con los que pretenden acabar.

            La paz mundial cada día está más comprometida y parece que eso importa poco a nuestros políticos porque siguen anteponiendo sus intereses personales a los generales.

Antonio CAMPOS

Otra de Magia Borrás

Pedro Sánchez se saca de la chistera otro conejo de feria de pueblo y filtra que no hará presidente de la Generalitat catalana a Puigdemont en detrimento del socialista Illa, que fue el ganador de las recientes elecciones autonómicas.

Él sabe que Puigdemont no puede dejar de apoyarle porque si lo hiciera se vendría abajo el castillo de naipes de la amnistía y de la independencia de Cataluña.

Otra cosa es que sus pactos secretos alcancen a que Illa sea presidente de la Generalitat en Barcelona a cambio de que los parlamentarios de Puigdemont apoyen a Pedro Sánchez en Madrid, compensándolos con todas y cada una de las solicitudes independentistas que pretende la formación ultraderechista catalana JUNTS.

Sería la jugada ideal para que todos quedasen contentos. Cataluña obtendría unos privilegios inimaginables cuando la inmensa mayoría de los españoles aprobamos la Constitución, en detrimento de otras regiones o comunidades autónomas, y Pedro Sánchez saldría reforzado ante el electorado español de cara a las ya inminentes elecciones europeas.

Y ¿qué tiene que decir de todo esto la oposición? Pero ¿de verdad existe una oposición, preparada, con proyecto de futuro, con las manos libres, que suponga un verdadero cambio político? Sus propuestas son tan nebulosas que parecen dignas de hacer el ridículo en televisión, inconsistentes, negando las actuaciones del poder gobernante sin proponer soluciones tangibles de ningún tipo.

Y en medio de este páramo aparece Pedro Sánchez con un nuevo capítulo de su libro de Magia Borrás. Y ha concedido tantas subvenciones, canonjías, prebendas y regalías a propios y extraños, que le será relativamente fácil conseguir su siguiente objetivo que, en cualquier caso, pasa por perpetuarse en La Moncloa.

Antonio CAMPOS

Llorar con verdades

Una vez más el Gobierno español en la persona de nuestro presidente señor Sánchez se erige en líder mundial de la nada y compromete el futuro de nuestra nación, no ya económica y empresarialmente, sino punto de mira de todos los conflictos habidos y, si seguimos el guion que parece previamente establecido, habrá en el futuro.

Somos adalides del Grupo de Puebla alrededor del que se junta el conglomerado de comunismo, droga y exportaciones ilegales de Hispanoamérica.

Somos receptores de toda clase de pandilleros con diferentes antecedentes locales, llegados a nuestro país de zonas en la que cualquier vida tiene un precio que, si siempre debería ser impagable en cualquier sitio y lugar, para ellos es como un juego, sin remordimiento de conciencia ni respeto por la vida.

Por mor de ignotos intereses se han hecho concesiones a Marruecos que pese al desesperado intento gubernamental por mantener la opacidad del número y actuaciones delincuenciales de quienes nos llegan, hay zonas en las que la policía tiene ya que entrar con las armas montadas a pesar de no poder responder a los ataques personales que recibe. Y un olor desmesurado a droga que se pasea ante los ojos de quien quiera verlas con prácticamente impunidad total. Nuestras cárceles solo se llenan de pequeños traficantes e insignificantes personajes que, nunca, son los verdaderos responsables de las grandes operaciones que se llevan a cabo en España como camino cierto y destino final a Europa.

Igualmente, todas las mafias del mundo se han establecido en España y no somos conscientes, ni siquiera pensar, hasta dónde llega la corrupción en personas y organismos públicos y privados de todo tipo. El mayor capo de la droga africana quedó en libertad bajo fianza y ha huido del país en veinticuatro horas «sin dejar señas».

Nos enemistamos con Argelia, principal suministradora entonces de gas, lo que ha producido un encarecimiento de esta materia, que ahora importamos de Rusia, enemigo de nuestros aliados europeos y estadounidenses, a la vez que suministramos material bélico y recursos humanos en la lucha que los rusos mantienen contra Ucrania, país no perteneciente a la Unión Europea, pero que en teoría, sirve de contención a la expansión de lo que queda del comunismo bolchevique y defensa de los intereses generales y particulares de Estados Unidos y de la élite económica mundial que había copado las grandes infraestructuras industriales y empresariales de aquel país.

No contento con ellos ahora nuestro presidente va a suscribir un acuerdo bilateral de seguridad entre Ucrania y España, garantizándole apoyo militar sostenido a largo plazo hasta que se convierta miembro de pleno derecho de la Unión Europea y de la OTAN, algo similar a lo ya suscrito por dicho país con Reino Unido, Alemania, Francia o Italia, y que, además de poner en peligro el suministro de gas ruso a Europa y las derivadas que ello pudiera producir, es un frente común de resistencia de quienes se encuentran al alcance de un disparo del armamento nuclear ruso.

Hacemos frente común pro palestino, en contra de un pueblo judío que únicamente reaccionó con honor y coraje a un ataque a civiles inocentes que produjo mil cuatrocientos muertos, cuyo único pecado era que estaban bailando y divirtiéndose, olvidando los muchos actos terroristas yihadistas que durante años se han perpetrado en todo el mundo, incitando a las masas ociosas y subvencionadas a movilizarse, no por defensa de una religión que todos los dirigentes mundiales saben están recortando su propio poder y creando pequeños reinos de taifas locales, sino como ataque a lo que por encima de ideas políticas ha mantenido unida Europa durante siglos, la religión católica en sus diferentes acepciones, que lucharon entre ellas, pero siempre con algo que hoy se ha perdido, la fe, que es el santo y seña de la religión musulmana que se está utilizando para acabar con una Europa tal como la conocemos.

Mientras Rusia es nuestro enemigo, Puigdemont desafía a Pedro Sánchez y a todos los españoles recabando la presidencia de la Generalitat, que no ha obtenido en las urnas, proponiendo un plan de defensa para Cataluña, relaciones directas con la OTAN y diseño de su propia seguridad personal con ayuda de Rusia, que no es la primera vez que interviene en los temas de la independencia de Cataluña y que es uno de los asuntos que se pretende borrar para siempre con la amnistía, en mi opinión inconstitucional, que va a aprobar el Congreso en fechas próximas para la permanencia de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno.

La democracia se ha prostituido en España. Nos creemos que somos demócratas porque se nos permite votar una vez cada cuatro años. Y no somos conscientes que los partidos políticos no respetan ni cumplen aquellos programas con los que concurren a las elecciones y que es la base para apoyarlos o no con nuestro voto. España es el único país del mundo democrático en el que se ha impuesto la mentira política, el retorcimiento de las leyes y la justificación de cualquier acto siempre que el que lo cometa esté sustentado por el poder dominante.

Desde el imperio romano, ningún dictador ha abandonado el poder de muto propio, todos han muerto o en su cama o de forma violenta mediante un atentado. Como considero que España, a pesar de todo, es una democracia, imperfecta, pero democracia, espero que algún día nuestros gobernantes,  tanto los que mandan como los que están en la oposición, sean conscientes de la realidad del día a día del ciudadano, de la penuria cada vez más acuciante, de la falta de viviendas dignas para gente humilde y trabajadora, del agravio comparativo entre lo que perciben nuestras viudas y aquel que llega con la intención de no trabajar nunca, de la mínima diferencia entre el que se esfuerza y cobra el salario mínimo y aquel otro que está ocioso a las 12:00 h de la mañana en la plaza del pueblo y cobra casi tanto como él, de que la hidra catalana se ha dejado crecer de tal forma que yo, que soy defensor a ultranza de la unidad de la nación española, me estoy empezando a cuestionar si no es mejor que obtengan la independencia unilateral de forma rápida y quede desligada de España a todos los efectos antes que explote al unísono un conflicto religioso, una situación de pobreza, diversos frentes bélicos y una nueva guerra civil española.

Sé que este artículo no va a gustar a mucha gente. Pero como dice un refrán popular español «Amigo no es el que te hace reír con mentiras sino el que te hace llorar con verdades».

Antonio CAMPOS

¡Cómo de ha deteriorado la educación!

El Homo Atapuercus  Fachasocialistus emitió un gruñido propio de su especie creyendo que se dirigía a sus compañeros de cueva, sin pensar que sangre española de la otra orilla del océano le iba a contestar repudiando como calumnias e injurias sus palabras y poniendo de manifiesto que «el Gobierno de Pedro Sánchez tiene problemas como las acusaciones de corrupción que caen sobre su esposa, y que esperan que la justicia actúe con celeridad para esclarecer semejante escándalo que afecta directamente la estabilidad de la nación española».

El fango se extiende, y no precisamente en los pastos que el que se siente dueño del cortijo indica, enfanga hasta los olivos, que siempre han crecido verdes, iluminando con su fuego acharolado la verdad, y el capataz actual que los cuida dice que trabajan para minimizar el clima contrario al dueño de esclavos y a la vez esclavo de sus dueños.

Ahora saldrán los cuatro mil escribidores que liban los efluvios gubernamentales diciendo que es mentira o que son bulos inventados por el pueblo, que cada vez tiene más constreñida la libertad de expresión.

Antonio CAMPOS

El débil y el fuerte

El 16 de junio de 2022 publiqué un artículo titulado «La paja en el ojo ajeno» sobre temas impositivos en el que, en otras cosas, decía:

De quienes no se olvida Hacienda es de los pequeños comerciantes, porque tiene previsto, en preparación muy avanzada, a semejanza de lo que ya está haciendo el Gobierno Vasco, controlar la facturación de todos los negocios de servicio rápido, de venta inmediata, al por menor, de pequeños negocios, comercios y autónomos, mediante un sistema en el que sea el propio establecimiento el que emita una factura reducida de cualquier venta que se produzca, mediante un terminal conectado a Hacienda, con un código QR incorporado.

Hacienda podría comprobar en tiempo real o solicitar los registros de venta cuando lo considerara necesario, y el consumidor tendría la posibilidad de hacer un seguimiento mediante el código QR sobre si su compra ha sido registrada y declarada por el vendedor. El ciclo sería completo, cerrando la posibilidad de generar dinero negro que con demasiada frecuencia produce —yo debo estar equivocado pues todos los que tienen este tipo de negocios lo niegan—, al estar involucrados proveedores, clientes, empleados y titulares.

Veremos si el actual Gobierno es buen administrador, si tiene arrestos para poner en funcionamiento esta medida, si mantiene su propia norma de revalorización de las pensiones sin subir más los impuestos y, sobre todo, si se aplica con el mismo afán a recortar gastos improductivos.

Han transcurrido casi dos años desde entonces, la Deuda Pública se ha situado en 1.574,6 miles de millones de euros, habiendo crecido el 37,52% desde que Pedro Sánchez es presidente del Gobierno, la deuda per cápita ha pasado de 24.542€ a 32.610€ y no se han tomado más medidas que subir impuestos. Y es ahora cuando se anuncia, formalmente, que el plan de Hacienda consiste en que, a partir del 1 de julio de 2025, se va a aplicar el procedimiento descrito en párrafos anteriores a todas las facturas, que habrán de ser electrónicas y deberán llevar integrado un código QR para que el ciudadano particular pueda comprobar si la empresa que le ha proporcionado el recibo no ha hecho los deberes tributarios con la Administración.

Este retraso en la puesta en marcha del sistema, vendido políticamente como margen de adaptación identitaria y Plan de Recuperación del Gobierno destinado a impulsar el tejido empresarial español, se ha visto ralentizado por las demandas interpuestas ante la sección 1 de la Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco alegando que «era inconstitucional por vulnerar el principio de igualdad en un aspecto que consideramos es de competencia estatal», por lo que, con los nuevos pactos gubernamentales con los gobiernos autonómicos separatistas, habrán de dar su conformidad a ello para poder implantarlo en toda España, ahora nombrada como el Estado por nuestros gobernantes.

El espíritu de delación, o inquina contra el empresariado y autónomo, se impulsó por el Gobierno en el año 2021, encontrándose a disposición de cualquier ciudadano un impreso en cualquier oficina presencial o virtual de la Hacienda Pública, a través del que, en el año 2022, último periodo con datos disponibles, la Agencia Tributaria (AEAT) tramitó 16.146 expedientes como consecuencia de las denuncias (chivatazos) de unos contribuyentes sobre otros, incoando 3.871 actas que generaron una recaudación extra de 173 millones de euros.

No han tardado en levantar su voz contra esta medida del código QR diferentes personas y asociaciones, esgrimiendo que supondrá un incremento en los precios final de venta. Quiero creer que no están auto inculpándose como defraudadores fiscales porque la mayoría de los autónomos y pequeños empresarios claman a todo aquel que lo pone en duda, que no tienen nada que ocultar y que declaran la totalidad de los ingresos y pagos del flujo de sus negocios, por lo que es de esperar colaboren activamente en la puesta en funcionamiento de este sistema que, en cualquier caso, será una macro revolución en la contabilidad y devengo de impuestos en muchos sectores.

Yo, tras muchos años dedicado al mundo de la economía y las finanzas, soy de los que pone en duda esa pulcritud fiscal, al igual que afirmo existen las sociedades interpuestas, testaferros y signos de riqueza externa, en empresas y particulares de mayor relevancia económica, —llevamos unos meses en los que ilustres (por el puesto que tienen o cama que comparten, no por su ilustración cultural) nombres aparecen todos los días en los medios de comunicación—en los que Hacienda no entra, unas veces porque es muy difícil aportar la carga de la prueba de culpabilidad, y otras por algún secreto que no alcanzamos a comprender el común de los mortales. De siempre ha sido más fácil vencer al débil que al fuerte.

Antonio CAMPOS

El poder es un arma de doble filo

En el año 2022, cuando nadie hablaba de ello, escribía yo:

«France Soir es un diario francés fundado en noviembre de 1944, como un periódico clandestino vinculado a la Resistencia francesa durante la Segunda Guerra Mundial. En los años setenta era uno de los medios a través del que se comunicaban los miembros de ETA, por anuncios con claves preestablecidas y artículos convenidos. Entre sus colaboradores literarios ha figurado Jean-Paul Sartre, escritor exponente del existencialismo y del marxismo humanista, Premio Nobel de Literatura en 1964, que rechazó explicando que tenía por regla rechazar todo reconocimiento o distinción y que los lazos entre el hombre y la cultura debían desarrollarse directamente, sin pasar por las instituciones establecidas del sistema. Pareja de la filósofa Simone de Beauvoir que proclamaba la noción de libertad y su sentido concomitante de la responsabilidad personal, creyendo que «El hombre se hace a sí mismo».

France Soir tuvo una grave crisis económica en el año 2012, dejándose de publicar en papel. Desde entonces lo hace de forma digital y algunos otros medios de comunicación lo tildan de panfletario por ser antivacunas Covid y partidarios del uso de la hidroxicloroquina, alejado de la pertenencia masón del actual presidente francés, hallándose el Ministerio de Cultura francés desde 2021 en un procedimiento administrativo para quitarle a este digital el certificado de información política y general.

Elperiódico.com es un diario digital dirigido por el periodista Albert Sáez, pertenece al Grupo Zeta, que cuenta con 47 publicaciones en el mercado entre periódicos en papel, internet y revistas de todo tipo.

Periodista Digital es un diario digital dirigido por Alfonso Rojo, que inició su trayectoria profesional en Diario 16 en el año 1976, ha sido corresponsal de guerra y trabajado en los más acreditados medios de comunicación españoles, tanto escritos, digitales como en televisión.

Alvise Pérez es un joven sevillano, denostado e idolatrado a partes iguales en las redes sociales, que declara que “Siempre he tenido un desprecio absoluto hacia los partidos políticos porque, creo que son aglutinadores de votos basados únicamente en conseguir más apoyos para poder enchufar a más gente”. Con un equipo total de cinco personas y una financiación apoyada en pequeñas donaciones de sus lectores, unos le acusan de generador de bulos y otros como la única persona que hay en España que se atreve a decir la verdad, habiendo ganado todas las demandas judiciales que se han presentado contra él.

Que yo sepa, son estos cuatro medios de comunicación los que han informado sobre la “democrática” decisión de Pedro Sánchez, reunido consigo mismo y sin comunicación alguna al Rey, a la UE, a su Gobierno, a la oposición política ni al Parlamento Español, la consideración del Sahara como parte integrante de Marruecos, en contra de lo mantenido por la diplomacia española hasta entonces. Ello ha creado una crisis política con Argelia que puede redundar en toda Europa por la falta de suministro de gas argelino a corto plazo.

En estos momentos en los hay que tener mucho más cuidado al escribir, teniendo que hacerlo con condicionales, hipótesis, en tercera persona, metáforas y presunciones, que en la última etapa del periodo franquista, los citados medios escriben que los servicios secretos marroquíes chantajearon a Sánchez después de piratear su teléfono usando el software espía Pegasus y las relaciones de su esposa, Begoña Sánchez, con la organización AFRICA CENTER del Instituto de Empresas, para la que trabajaba la esposa de nuestro presidente del Gobierno, prestigiosa Escuela de Negocios de primer nivel mundial en la que los profesores están durante mucho tiempo sentados en los últimos bancos de las clases, aprendiendo de sus tutores las técnicas de desarrollo de lo que allí se enseña, y de la que Doña Begoña Gómez fue despedida de forma inmediata.

Hay que añadir que la empresa responsable de la seguridad de las comunicaciones del Gobierno español es INDRA, esa cotizada en Bolsa de la que diferentes organismos afectos al poder gobernante han tomado un 28% de participación en las dos últimas semanas y cambiado el Consejo de Administración.

Fuera de los medios citados, nadie ha abierto la boca, es más, todo el mundo ha cerrado filas en torno a esa decisión histórica tomada, que podría provocar una guerra abierta entre los dos países más importantes del Norte de África; ha ocurrido algo similar a las películas sobre la Mafia siciliana, que todo el mundo sabe quién es el asesino, pero nadie ha visto nada y todo el mundo calla.

Los más ultra extremistas defensores de Pedro Sánchez acusan a los medios citados de ser panfletarios y enemigos declarados del siempre ponderado, nunca mentiroso y ejemplo de honradez política y personal que es Pedro Sánchez.

Como escribía France Soir “todo acaba por saberse para quien sabe esperar” porque, muchas veces, el amigo de hoy se vuelve en enemigo mañana. Mientras tanto, me temo que este será uno más de los grandes secretos de nuestra democracia en el que siempre sale perjudicado el que se levanta a las siete de la mañana para ir a trabajar todos los días».

Desde entonces las actividades empresariales de la esposa de nuestro presidente del Gobierno han estado presentes, unas abiertamente y otras entre bambalinas, en diversas operaciones que si bien pudieran no constituir delitos como tales, es de sentir popular su reprobación dado el miedo a posibles represalias o demoras indefinidas ante los requerimientos o consejos procedentes de la persona con quien el  citado comparte cama y mantel, algo muy parecido a lo que ocurría cuando doña Carmen Polo de Franco visitaba alguna joyería de su agrado o Iñaki Urdangarín proponía algún proyecto, no había ningún  valiente que se opusiera al poder establecido en cada momento. Hoy mismo, el digital Vozpópuli pública que «Moncloa, 13 Ministerios y 11 empresas públicas han promovido la carrera y negocios de Begoña Gómez. Contactos y patrocinios insólitos desde el punto de vista de la gobernanza y el buen gobierno pero a los que además Gómez no podía aspirar con su currículum y trayectoria anterior».

Pedro Sánchez monta una pantomima política y un aquelarre de fieles, que creía iban a pasar del medio millón de personas y no han superado las diez mil, según datos de la propia Subdelegación del Gobierno en Madrid, lo que provocó un enorme enfado al núcleo más duro y cercano de sus colaboradores y que, pese al fracaso, ha tratado de vender como una aclamación popular, un referéndum no vinculante jurídicamente pero sí moral —algo parecido a lo que piensa hacer con el independentismo en Cataluña y El País Vasco—para afianzarse en el poder con sentido de permanencia en el tiempo, imbuido como profeta del pueblo al estilo de Carlos Marx, Hitler o Lenin.

Tras una ausencia laboral injustificada de cinco días como primer ejecutivo del Gobierno de la nación, vuelve henchido, arrogante y haciendo gala de una prepotencia sin límites, «Con más fuerza … sintiéndose adalid de la democracia … con el compromiso de la regeneración pendiente de nuestra democracia … y que la mayoría social, como ha hecho estos cinco días, se movilice en una apuesta decidida por la dignidad y el sentido común, poniendo freno a la política de la vergüenza que llevamos demasiado tiempo sufriendo, porque esto no va del destino de un dirigente particular». Lo que es lo mismo, no ha habido, ni hay, democracia en España, todos los anteriores presidentes de gobierno desde la Transición, incluidos los socialistas, no han sido demócratas, y es él y solo él, el que va a regenerar la nación con «su» democracia. Miedo, verdadero miedo me dan éstos salvapatrias cuya única función es dictar sin admitir siquiera la corrección de una coma o un acento en sus textos.

Rápidamente han salido en ayuda del oficiante los monaguillos. El ministro de exteriores, el salomónico señor Albares, se ha pronunciado en los siguientes términos: «Es una decisión que es buena para España, es buena para las políticas progresistas que él lidera y encarna y que es buena para la posición de liderazgo de España en Europa y en el mundo» «Estoy feliz —prosiguió— porque hoy no ha triunfado la calumnia, no ha triunfado el bulo, no han triunfado los acosadores, no han triunfado los que creen que para ser mejor político hay que ser peor persona y hay que tratar al adversario como enemigo al que hay que destruir cueste lo que cueste a cualquier precio».

Y los parásitos laborales sindicalistas en la persona de los secretarios de UGT y Comisiones Obreras han pedido convertir el Dia Internacional de los Trabajadores del Primero de Mayo, en una protesta a favor de la democracia, que está «pervertida» por las actuaciones judiciales.

Se está empezando a respirar un tufo excesivamente «maduro» para la convivencia y democracia, sin adjetivos de ningún tipo, en nuestro país.

Como opinión, no como noticia ni como bulo, voy a aventurarme a hacer un pronóstico, recogido en los jardines del Hotel La Mamounia Palace: Se va a iniciar una censura a la prensa desafecta al régimen sanchista, feroz y vengativa desacreditación de la oposición política, furibundos ataques a jueces y magistrados, desarme y control de las fuerzas de orden público, disminución de efectivos militares en la Península bajo el pretexto de colaboración de la paz mundial, selección por ideario y no por preparación y méritos de los que ahora ostentan el empleo de Comandante de cara a su ascenso a General cuando llegue su momento, olvídese Palestina de ser reconocida por España como Estado, y la Espada de Damocles que Sánchez tendrá sobre su cabeza y que sufragará con mas subidas de impuestos, tendrá doble filo: Marruecos al sur y Europa al norte, que cualquier día podría exigir responsabilidades en materia de política exterior si se llegaran a demostrar concesiones en temas de seguridad europea e inmigración derivadas de temas personales y no de políticas generales europeas.

Hay un dicho árabe que dice que «el poder es un arma de doble filo, y por eso es fácil cortarse con uno de ellos».

Antonio Campos

Presidente fijo discontinuo

Estoy en una edad en la que no sé exactamente cuál es mi sitio en concreto. Nací, exactamente, cien días antes de morir Franco, por lo que me encuentro próximo a cumplir medio siglo de vida. Cuando trato de integrarme en la generación siguiente a la mía, me encuentro desubicado y toda ella me mira como si fuera un espía que quisiera profundizar en el conocimiento del carpe diem en el que viven, más aún si me acerco a sus asuetos juveniles o infantiles en los que, de forma inconsciente para ellos, se les oculta una parte importante de la historia y, al igual que sus abuelos lo fueron en su juventud, se les imbuye el pensamiento excluyente para quienes no piensan como aquellos encargados del poder dominante del momento.

Ayer viernes, desde la cama de un hospital asiático, evidentemente a través de internet, estuve en un acto protagonizado por la generación anterior a la mía, que también me miran como un rara avis por tratar de saber más sobre su existencia y su forma de vivir en dos siglos diferentes y sistemas políticos antagónicos. Era un acto similar a esos cuentacuentos dirigidos a los jóvenes, pero en plan cuenta historias de sus vivencias, lo que es lo mismo, realidades a las que han tenido que enfrentarse para llegar a poder disfrutar de una relativa cómoda jubilación en la que ahora se encuentran.

Tomó la palabra un hombre de cuidado aspecto personal y edad que igual pudiera ser de setenta que de ochenta años, voz segura y aspecto de tener experiencia de haber hablado en público en su etapa profesional.

Inició su exposición haciendo una introducción a los cinco días de asueto total que, reunido consigo mismo, se ha tomado el presidente del Gobierno Pedro Sánchez con motivo de la denuncia que una organización de ideario político contrario al suyo ha presentado contra su cónyuge Begoña Gómez, y la manifestación prevista para este fin de semana en su apoyo.

—En el tardofranquismo finales de los años sesenta y principios de los setenta, yo vivía en una pequeña ciudad a la que llegó un médico depuesto como profesor de la Universidad de Murcia, que era el segundo de abordo del entonces ilegal partido político liderado por el profesor Tierno Galván. Nos reuníamos en su casa, cada noche cinco personas diferentes, de tal forma que no nos conocíamos todos los que, con diversas ideologías, el único y último objetivo era estar contra lo que se llamaba una democracia orgánica, pátina de una dictadura ya en estado avanzado de «dictablanda» y que empezaba a dar síntomas de una muerte segura a no muy largo plazo.

A partir del mayo del 68 francés se empezaron a producir revueltas y reivindicaciones, principalmente, por parte de estudiantes universitarios y obreros de los sindicatos UGT y Comisiones Obreras, que se dedicaban a lo suyo, a defender a los obreros y no va a estar a las órdenes del partido gobernante como ahora se encuentran, a las que las huestes franquistas respondían con multitudinarias manifestaciones de desagravio al Generalísimo que eran un baño de multitud, para lo que se montaban viajes desde todos los puntos de España hacia Madrid, en autobuses pagados por el gobierno y a cuyos exaltados viajeros se les facilitaban bocadillos y bebidas; era un día de turismo paleto en la capital de España y, en algunos casos, refociles sexuales de los que no estaban dotadas sus ciudades de origen, con lo que el éxito era completo. No se encuentran tan alejados los usos y maneras del franquismo de los del sanchismo.

Ni que decir tiene que el enriquecimiento económico personal que rodeaba al jefe del Estado, que es de suponer que algo habría, siendo el más notorio de aquella época los negocios del yerno de Franco, estaba muy lejos de los miles de millones de euros «distraídos» por diferentes protagonistas durante el actual periodo democrático, en el que las empresas del suegro, hermano y actividades de la esposa del presidente del Gobierno se encuentran en entredicho en prácticamente todos los medios de comunicación.

Aunque las comparaciones siempre son odiosas, queda muy cerca el caso Urdangarin, esposo que fue de una de las infantas de España, que aprovechó los contactos de su agenda y el miedo escénico que su ayuntamiento carnal causaba en aquellos a cuya puerta llamaba para obtención de provecho propio y por lo cual fue encausado, procesado y sentenciado a pena de cárcel.

Claro que hay una sustancial diferencia entre este caso y el que ahora nos ocupa. El de Urdangarín fue una bomba con espoleta retardada contra la monarquía; el actual es todo lo contrario, es seguir adelante con el desmembramiento de España, con una posición feminista mal enfocada y que el gobierno no es capaz de parar el número de delitos sexuales y de asesinatos de mujeres por mucho que incremente los presupuestos para este tema, la invasión silente de otras culturas que, en un elevado porcentaje, llegan a vivir del trabajo e impuestos del resto de ciudadanos, la desertización del campo y destrucción de nuestra agricultura y empresas, todo ello para ser el adalid de la agenda 2030 que en países como en el que me encuentro en estos momentos y desde el que escribo estas líneas, no sé si oficialmente su postura teórica es favorable a ella, pero la realidad es que sus pantanos están que rebosan agua, sus campos plantados al cien por cien sin el más mínimo desaprovechamiento agrícola y las más importantes empresas mundiales están aquí implantadas, con fábricas a pleno rendimiento y sin problemas administrativos gubernamentales de ningún tipo—.

Este es un relato acelerado y dictado, sin tiempo para correcciones. Es igual. Estoy convencido que la actuación de Pedro Sánchez solamente ha sido eso, una actuación de un actor teatral mediocre que actúa como galán protagonista de la película, que no va a dimitir, que va a utilizar toda esta opereta que ha montado para decir que las bases de su partido y de la sociedad en general le piden que siga, como si ello fuera una penitencia que tuviera la obligación de cumplir, y no su irresoluble ambición personal política, porque fuera de ella no tendría la clac agradecida o subvencionada que ahora le rodea ni las defensas de todo tipo que se encuentran a sus órdenes. Los ataques a los jueces, a la prensa y a esa más de media España que no está en su bando van a ser furibundos. Han resucitado el premonitorio guerracivilista del «no pasarán» que se va a convertir en la muralla que podría provocar el mayor enfrentamiento entre españoles desde el año 1936.

Y es tal la forma que ha prostituido la democracia y cómo se ha hecho con todas las grandes decisiones de poder, que ha convencido a muchas mentes cognitivas fijas discontinuas —igual que él se ha convertido en presidente fijo discontinuo— que es él y solo él quien está en posesión absoluta de la verdad.

Antonio Campos

Independentismo

En Cataluña el porcentaje de extranjeros es el 20,83% de la población, mientras el 50,11% de los delincuentes encarcelados son de ascendencia extranjera; por tipo de delitos, el 62% de los encarcelados por hurto, el 53% de los condenados por robo, el 68% por tráfico de drogas, el 51% de los agresores sexuales y el 52% de los homicidas, son de origen extranjero.

A ello hay que añadir los extranjeros nacionalizados españoles, que durante el año 2022 han alcanzado 2.114.586 personas en todo el país, de las que no tengo datos sobre cuántos de ellos residen en aquella región.

Allí se produce una doble moral: Desde el curso 2020 hay una asignatura de «Religión Islámica» en las escuelas públicas de la Generalitat y Cataluña es la región española donde nacen más yihadistas, siendo el centro de planificación del yihadismo del continente europeo. Todo ello como consecuencia de la política antiespañola propiciada por Jordi Pujol y Heribert Barrera que «es más difícil integrar a un latinoamericano que un andaluz (…) Esto, seguro; y más que a un marroquí, la religión aparte, a los latinoamericanos les cuesta entender la catalanidad».

Próximamente va a haber elecciones autonómicas en las que gran parte de ese colectivo, los que tengan derecho a voto, lo harán a los partidos independentistas y al PSC, por el único motivo de ser sus actuales adalides de las subvenciones de todo tipo que reciben, en una retroalimentación de supervivencia, política unos y económica otros.

¿Qué pasaría si todos o parte de ellos se organizaran en torno a un partido de corte islamista? Transcribo el comentario que hace un lector de un medio de comunicación catalán:

«18 de marzo de 2024 – No hay más que ver lo que ya ha pasado en Alemania, Francia, Holanda, Bélgica, Suecia, y los problemas que ya tienen. Entonces ¿por qué estamos cometiendo exactamente los mismos errores con los mismos medios (básicamente fronteras abiertas, ayudas sociales a cambio del voto y «derecho» de reunificación familiar). Tú te puedes equivocar alguna vez, porque somos humanos. Cuando te estás equivocando siempre en lo mismo es porque es política de Estado. Luego dirán que esta farsa es una democracia, como si esta invasión la hubiera votado el pueblo, que además la financia íntegramente de su bolsillo. Será más bien que cualquiera con los millones suficientes para comprar medios de comunicación y políticos puede imponernos sus deseos aunque no queramos».

Los ciudadanos de las dos autonomías más decididamente independentistas, Cataluña y el País Vasco, ¿piensan que si algún día alcanzaran la independencia tanto los partidos de ultraizquierda Bildu y ERC como los de ultraderecha JUNTS y PNV iban a caminar todos en la misma dirección y mantener las políticas migratorias actuales? Craso error porque ambos bloques están en las antípodas, solo les une su ideario independentista que, si lo alcanzasen alguna vez, se convertiría en una nueva guerra política en sus nuevas fronteras.

Aquí hay que hacer un gran paréntesis y dejar constancia de que quien viene a trabajar y a vivir honestamente es bien recibido, acogido y protegido por todo bien nacido. Pero eso no tiene nada que ver con que hoy en día no es políticamente correcto decir que ni Europa ni España puede dar cabida, asistencia, medios y pensiones permanentes a todo aquel que llega a ella para vivir gratis y sin contraprestación social ni laboral de ningún tipo.

Todo esto lo saben políticos, ciudadanos autóctonos y migrantes, legales e ilegales. Y cada uno, a su forma y manera, defiende sus propios intereses: Unos —el Gobierno—, mintiendo; otros —los independentistas— con «su» verdad» para conseguir su objetivo inmediato; otros —la población nacional— esperando el juicio y ejecución final de rodillas; y otros —los migrantes— esperando su momento. Yo también espero, como Godot, verdaderos aires de libertad, democracia y pacífica convivencia.

Antonio CAMPOS

Pólvora del contribuyente

En los últimos años de la década de los sesenta del siglo pasado, los que éramos mozalbetes nos habíamos criado con el queso amarillo y la leche en polvo de los americanos; el vino y la gaseosa se refrescaba en el pozo del patio; habíamos comido quintales de judías, lentejas, arroz y garbanzos; los niños hacían cuatro viajes de ida y vuelta al colegio todos los días, andando; jugaban en la calle; no había chicos con pies planos ni dientes torcidos, todos flacos y duros como el acero, de comer poco y jugar mucho; para estudiar con beca había que sacar una nota media mínima de notable en la convocatoria de junio; los padres no hablaban nunca con sus hijos de penurias pasadas. Nunca he sabido si era miedo, prudencia, alejarse de los recuerdos o evitar sufrimientos innecesarios a sus hijos. Lo que es verdad es que estábamos ignorantes de lo que había ocurrido en España en los años anteriores al nacimiento de cada uno de nosotros; mucha gente de la España interior vieron lo que era el mar y las gambas cuando tenían dieciocho años; el régimen político era intocable e inviolable de palabra o hecho; si no te metías con Franco o con la Falange, la seguridad ciudadana y personal era muy superior a la actual, en la que cualquiera, salvo la policía, puede agredirte por cualquier cosa de mínima importancia. Y a partir de los primeros años de la siguiente década surgieron las clandestinas asociaciones democráticas, a las que muchos se subieron después de morir Franco.

España – años 60

Después vino la Transición, modélica, elogiada y estudiada en facultades de Ciencias Políticas de todo el mundo, porque fue un consenso en el que todos sus protagonistas tuvieron que ceder en algunas o muchas de sus pretensiones para iniciar el más largo periodo democrático en la historia de España.

Se progresó mucho y bien, la historia permaneció en los libros para generaciones futuras, los muertos estaban enterrados y olvidados, las penas y el hambre pasados quedaron en el olvido y el futuro era prometedor, avanzando hacia una sociedad del bienestar que se palpaba en todos los sitios.

Hasta que llegó Rodríguez Zapatero como peón —blanco— de confianza de la élite mundial y nos vendió lo de la «multiculturalidad» y dejó la nación en quiebra técnica; Rajoy, que se dedicó en exclusiva al tema de recomposición económica del desastre con que se encontró, olvidando la política; y Pedro Sánchez, el presidente más mentiroso en la historia de España, que se inició en la política muy joven, en una organización de George Soros, peón —negro— de una Europa que Estados Unidos ha convertido en tierra de experimentos, China en conquista comercial, y colonizada por esa parte del islamismo que no quieren ni aceptan en los países musulmanes ricos, como Arabia Saudí, Qatar, Dubái, Omán o Kuwait, en dónde quién llega tiene que trabajar para ganarse el sustento diario y en los que no existe delincuencia ciudadana de ningún tipo, y cuyos regímenes deben importar muy poco a todos los dirigentes políticos, que visitan esos países con mucha frecuencia y les conceden la organización de importantísimos eventos de repercusión mundial.

En aquellos años sesenta en los que «reinaba» el general Franco en España, la televisión era en blanco y negro, solo emitía Radio Televisión Española, en primera y única cadena, acababa la programación a las doce y media de la noche con el último telediario y el himno de España.

Algunos directores y conductores de programas: Juanjo Menéndez, Jesús Álvarez, Enrique Rubio, Joaquín Soler Serrano, Julita Martínez, Alberto Closas, Tony Leblanc, Narciso Ibáñez Menta, Elvira Quintillá, Álvaro de la Iglesia, Francisco García Pavón, Rosa María Mateo, José María Sánchez Silva, Victoriano Fernández Asís, Antonio Gala, Maruja Callaved.

Entre otros, había un espacio que se titulaba «Estudio 1» en el que se representaban periódicamente obras de teatro como Antígona (Jean Anouilh), Calígula (Albert Camus), Carta a París (José Antonio Giménez-Arnau), César y Cleopatra (George Bernard Shaw), Deseada (Max Aub), Don Gil de las Calzas Verdes (Tirso de Molina), Don Juan Tenorio (José Zorrilla), El avaro (Moliere), El Gran teatro del mundo (Calderón de la Barca), Exiliados (Joyce), Fedra (Miguel de Unamuno), Hamlet (Shakespeare) y cientos de obras de parecida importancia como «Doce hombres sin piedad» (Reginald Rose) interpretada por un elenco irrepetible en el panorama escénico o peliculero de hoy en la que los actores no saben vocalizar: Jesús Puente, Pedro Osinaga, José Bódalo, Luis Prendes, Manuel Alexandre, Antonio Casal, Sancho Gracia, José María Rodero, Carlos Lemos, Ismael Merlo, Fernando Delgado y Rafael Alonso.

Por favor, los que no sepan quién fue el Conde Lucanor, el Cid, el alcalde de Zalamea, Carlos III o Isabel II, tampoco sabrán quienes eran estas personas; que los busquen en Google —antes había que buscarlo en una biblioteca— y se documenten porque, en aquellos entonces, decíamos que la televisión española era muy mala.

Mala, ¿con relación a qué? La semana pasada se conoció que TVE ha contratado a un presentador llamado David Broncano con un contrato de dos temporadas, 18 meses de blindaje, 155 programas y un coste total de 28 millones de euros.

Este presentador, gallego, de cuarenta años, que ha trabajado en el Grupo Prisa, ganador de tres premios Ondas —que los concede el mismo Grupo Prisa—, el último por un programa llamado «La Resistencia», que presenta un share inferior al 2% de audiencia en las televisiones de pago (Movistar Plus +), en tono gamberro, haciendo juegos con frases de doble interpretación sobre las drogas, alcohol o sexo.

Además del menosprecio para la calidad humana y profesionalidad que esto supone para la extensa plantilla que tiene televisión española, todo apunta a un intento de muro contrapuesto al programa «El Hormiguero» de Pablo Motos, con quién no comulga nuestro presidente Pedro Sánchez y al que no consigue que cierre la boca en sus informaciones y opiniones contra la actual política que él lidera.

Es de suponer que este presentador sea el intento de control mediático total, entrevistando y loando al sanchismo en todas sus acepciones, al Clan de la Ceja que subvenciona, a los adictos y encubridores que los siguen y a todo aquel que tenga algo que decir a favor de las últimas brillantes ideas de Pedro Sánchez de nacionalizar a ese medio millón de paseantes ociosos y subvencionados que pretende hacer, con la aquiescencia de la otra columna del perfecto templo arquitectónico en el que nos movemos, de esos dos mil facinerosos que Mohamed VI ha soltado de las cárceles con motivo del Ramadán de este año, y ya veremos si se añaden los 300.000 fanáticos islamistas votantes del terrorismo de Hamás que ahora se encuentran en la franja de Gaza y que no quieren, bajo ningún concepto, sus correligionarios —no solo los países ricos— de Egipto, Siria, Jordania, Líbano, Argelia o Marruecos, mientras Europa se encuentra amenazada por el terrorismo islamista en todas las ciudades en las que se está jugando la Champions League de fútbol, y se ocultan las noticias como esa que ha sucedido en el barrio de Lavapiés en Madrid en el que un marroquí al que iba a detener la policía por estar vendiendo droga llamo a sus «camaradas», presentándose treinta de ellos en un momento —como no hacen nada, están disponibles para su lucha tipo Martini (dónde sea y a la hora que sea)—, hiriendo a siete policías que tienen prohibido hacer uso de sus defensas contra estas personas, con lo que se castiga gubernamentalmente la integridad física de las Fuerzas del Orden y de todos los ciudadanos.

Barcelona – Las Ramblas – Año 2024

España es la puerta principal a Europa por dónde está entrando esa inmigración descontrolada y de ideología guerrera, la desertización de la tierra y la destrucción de los cultivos, el cierre de las industrias, la demolición de pantanos y hasta las restricciones al turismo. Todo ello nos llevará a ser dependientes de terceros, a vivir de subvenciones, a ser esclavos de ese «nada» que no se ve, pero que es «todo» lo que ya controla nuestras vidas.

Antonio CAMPOS

La ley de Murphy

La ley de Murphy dice que si algo puede salir mal, saldrá mal. Murphy era un ingeniero aeroespacial y formuló su ley en 1949 después de descubrir un fallo en todos los electrodos del arnés de los pilotos. Esa «ley» tiene su principal explicación en la memoria selectiva y en nuestros sesgos, que nos hace temer y recordar más los casos negativos que los positivos.

A la izquierda del PSOE apareció un día Podemos, un grupo de universitarios comunistas que han multiplicado exponencialmente su patrimonio personal, manteniendo en la pobreza a quienes les siguieron y les encumbraron. Liderados por Pablo Iglesias como vicepresidente del Gobierno —sí, el que ha acabado no sabiendo gestionar una tasca de barrio, que se quedó sin cerveza el mismo día de su apertura y tuvo que cerrar al quinto por avería—, Irene Montero como cabeza pensante de una ley teóricamente feminista con la que se pretende confundir qué es un hombre y qué es una mujer, invirtiendo la carga de la prueba judicial para penar al denunciado, y Yolanda Díaz —comunista con carnet oficial— como salida a una crisis interna y medida de supervivencia de todo ese grupo que jamás han estado a la altura de los puestos que han ostentado.

Yolanda Díaz ha sido la hidra que se ha encargado de deglutir a todos ellos, la inventora del trampantojo de los «fijos discontinuos» que es la mayor mentira que se ha utilizado en la historia de España para encubrir el número real de personas sin trabajo, con veleidades de ocupar la presidencia del Gobierno si algún decenio de estos Pedro Sánchez es llamado por sus valedores mundiales para otros altos designios.

Pedro Sánchez será todo lo que pensemos y queramos decir, pero no es tonto. Y ya ha empezado la vieja máxima de «divide y vencerás», promocionando a medio plazo la sustitución de la ahora vicepresidenta por Ernest Urtasun que, según la información dada a conocer en Hungría por Magyar Nemzet en 2022, está dentro de los periodistas y políticos españoles «aliados fiables» de la Open Society Foundations de George Soros.

Ernest Urtasun Domenech, ministro de Cultura. 41 años, Economista. Vivía en el barrio de Sant Gervasi de Barcelona (uno de los más caros). Estudió en el Liceo Francés (otro comunista en colegio de élite y de elevado coste). Ingresó en la carrera diplomática en 2010, solicitando la excedencia en 2014 para reincorporarse a actividades políticas, la mayor parte en Bruselas. En resumen, funcionario público durante cuatro años y el resto, político de oficio. Es un acérrimo ecologista a cuya causa pospone el encauzamiento de ríos, pantanos, limpieza de montes y protección de los animales, así como antitaurino declarado que considera la tauromaquia como «una actividad injusta, sádica y despreciable».

Su primera idea como ministro fue desmontar el Museo del Prado, «acercando las obras a toda la ciudadanía de nuestro país», para que los cuadros estén repartidos por 281 museos e instituciones que viajen por toda España.

A la semana de su nombramiento, empezaron los cachondeos con él, pues una de sus primeras decisiones ha sido publicar un mensaje en recuerdo de la muerte de la poetisa Gloria Fuertes, diciendo «Hoy hace 25 años que nos falta Gloria Fuertes. Medio lustro sin una poeta y cuentista libre …» ¿Este señor es el responsable de la cultura en España?

Su siguiente aparición pública fue para proponer que «se enseñe catalán en todo el país», entendiéndose por «país», en este caso, a España, palabra que ni siente ni sale de su boca, porque está «muy preocupado por los últimos datos del uso del catalán en Cataluña. Su uso ha bajado un 8 % y solo uno de cada cuatro jóvenes lo tienen como lengua habitual. Me preocupan los datos de bajada. Es una riqueza que hemos de preservar».

Perfecto. Cataluña —el caucus del poder gobernante— odia el idioma castellano, multa a quién rotula o atiende un servicio en castellano, incumple la ley que le obliga a dar un porcentaje de clases en castellano, vigila a los niños hasta en los recreos de las clases para que no hablen castellano, no admite denuncias, demandas o correspondencia oficial en idioma castellano, y este señor pretende que todos los españoles hablemos el catalán para así poder movernos y hacer negocios por Nueva York, Londres, Hong Kong, Tokio o Beijing.

Ahora ya nos encontramos en la fase de la amnistía, del referéndum y de la independencia. Y la penúltima será que, habiendo conseguido esa independencia, les sigamos pagando las pensiones por daños y perjuicios históricos.

No estaría de más que los políticos hicieran un curso contra la mentira y la disonancia cognitiva fija discontinua.

Antonio CAMPOS